Día Nacional del Bombero: héroes sin capa que arriesgan su vida

MORELIA, Mich., 22 de agosto de 2023.- Ser bombero voluntario implica disciplina y pasión por servir, además de dejar a un lado las reuniones con amigos, celebraciones familiares e incluso estar ausente en las noches de navidad y año nuevo, así coincidieron los integrantes de las dos corporaciones de Bomberos, los Voluntarios y los Profesionales de Uruapan.

En el marco del Día Nacional del Bombero, celebración que se remonta al año de 1873 en el puerto de Veracruz, aquel 22 de agosto se creó el primer Cuerpo de Bomberos de México, pero el Día del Bombero se instituyó oficialmente en 1956.

Quadratín conversó con algunos integrantes de dichas corporaciones, todos, quienes argumentaron que pese a ser una actividad voluntaria en su totalidad, la labor altruista que realizan día a día en beneficio de os uruapenses los llena de orgullo, aunque en cada servicio esté en riesgo hasta su propia vida.

Incendios, accidentes, inundaciones, fugas de gas, son algunas de las emergencias que atienden, sin importar la hora, el día o las condiciones del tiempo.

Salvador Velázquez, integrante de Bomberos Profesionales de Uruapan comentó en entrevista que desde su niñez le nació la inquietud de formar parte de una institución de auxilio, y ahora puede realizar la heroica labor de forma voluntaria, combinándolo con sus estudios de Ingeniero Agrónomo.

Por su parte, José Salvador Navarro, miembro de la misma corporación, egresado de la Facultad de Ciencias, con un año y medio dentro de las filas de BPU, señaló que dentro del grupo han hecho una familia, por lo que disfruta la pasión del servicio.

María Dolores, mujer bombero que viste el uniforme de Bomberos Profesionales de Uruapan, madre de familia y doctora de profesión, dijo que ha sido difícil el camino, pero el respaldo de los compañeros le motiva a seguir brindando el auxilio a la población.

Por parte de los Bomberos Voluntarios, el Primer Comandante, Raúl Padilla, con 27 años en las filas de la institución, dijo a Quadratín que su abuelo fue bombero, por ello lleva en la sangre esa pasión. Agregó que la entrega al servicio les ha permitido lograr varias donaciones de las corporaciones de Bomberos de la Unión Americana, todos ellos a disposición de la ciudadanía.

En Comandante Segundo, Carlos Rodríguez, con 23 años de servicio, dijo que desde su niñez tuvo el deseo de ser bombero, su familia se oponía por el riesgo que conlleva, pero finalmente tuvo el respaldo de sus familiares. Agregó que con casi cien agentes en las filas de la institución, se ha hecho una gran familia en el cuerpo Voluntario de Bomberos.

José Ricardo Silva, locutor de radio, comentó que lleva siete años siendo voluntario, además de cursar la escuela para ser bombero, señaló que en ocasiones hay disgustos familiares por su entrega al voluntariado, recordó que una navidad se encontraba con su familia en la mesa, listos para compartir la cena, cuando una llamada de emergencia le obligó a salir para atender el llamado, pues es solo uno de los sacrificios que implica el ser Bombero.