Inicia la invasión de Toritos de Petate en Morelia

MORELIA, Mich., 2 de marzo de 2019.- Ante el sentimiento de una interminable fila de toritos de petate a lo largo de la avenida Madero, los propios participantes de cada cofradía, entre la espera y la espera, encontraron sus maneras de divertirse y pasar el tiempo que les tocaba estar detenidos.

“Esta madre sí pesa”, dice un joven que casi se ha hincado sosteniendo un toro que pesa, dice, sobre 50 kilos. Sus compañeros se prestan a auxiliarlo. Y es que no ayuda el clima de la ciudad, porque para entonces, más allá del mediodía la avenida parece estar ardiendo en llamas.

“Pinche calor está bien cabrón” dice una señora que parece muy tranquila, pero que en un arranque de franqueza ante el sofocón suelta la frase; pierde los estribos. “De verso y sin esfuerzo” le revira un señor que la acompaña mientras ríe, pero eso no parece calmar la ira de la mujer.

“¡Tengan madre! ¡tengan madre! El torito tiene hambre!”, gritaban unos a coro porque les tocaba esperar con el torito varios minutos, los demás le reían les reían las ocurrencias.

Las cofradías más numerosas se intercambiaban al torito con mucha rapidez, por lo que a la vista del simple espectador parecían estarse moviendo todo el tiempo, bailando y girando al toro sin agotarse.

Y mientras la procesión del calor, intermitente, seguía por la avenida con los toritos llevando figuras multicolores de diablos panzones, dragones, piratas, pavorreales, y hasta el Dios Neptuno. Eso sí, la procesión todo el tiempo estuvo acompañada de música que muchas veces se confundía entre tanta banda de viento, y además ríos de gente.