Mira, y si la pagamos a meses ya sale…

MORELIA, Mich., 18 de noviembre de 2017.- Por fuera parece todo muy tranquilo, si acaso uno puede darse una idea de la cantidad de personas por los automóviles estacionados. Dentro de la tienda departamental el caos. Solamente en las cajas se pueden ver largas filas de carritos de supermercado llenos de productos; sobresalen las pantallas planas.

El Buen Fin ha llegado pero aún estamos lejos si queremos emular al Black Friday norteamericano, donde la gente se arrebata los productos por sus precios bajos. De este lado de la frontera, los costos apenas son unas rebajas en comparación a los precios regulares.

Entre los pasillos la gente va y viene; ve una cosa, luego otra, revisa etiquetas y se convence: es más barato que el resto del año, “mira, y si la pagamos a meses ya sale”, le dice un hombre parado frente una pantalla a su esposa.

En otro pasillo, una persona asegura que un producto estaba a 700 pesos y ahora aparece con un descuento de 300 pesos, el asunto es que esa rebaja se aplica a los mil 100 que cuesta ahora, “¡no mamen!, ahora voy a pagar 800, y yo que me estaba esperando a ver si bajaba”, le dice un hombre molesto a otro.

Según la información que reporta el portal Milenio en una nota de la periodista Sandra González, en una gira por Nuevo León, Ildefonso Guajardo, titular de la Secretaría de Economía (SE) aseguró que esperan una derrama económica de aproximadamente 100 mil mdp en este fin de semana que, asegura, será muy benéfico para las familias mexicanas.

En información que el mismo funcionario federal dio, apenas el año pasado, de los 90 mil millones de pesos reportados como derrama económica, 55 mil millones fueron pagados a través de tarjetas de débito o en efectivo, mientras que sólo 35 mil millones se hicieron vía tarjeta de crédito, por lo que aseguró no habrá un endeudamiento.

Mientras tanto en los centros comerciales la gente acude y compra. Todo aquello que huela crisis, a poco dinero y a penurias, parece no importar.

En los estacionamientos de estos centros comerciales, los vehículos salen cargados de productos que irán pagando los clientes, en el mejor de los casos, a lo largo de 12 meses. La policía ,apostada en los estacionamientos de centros comerciales, vigila para que no suceda nada.