Pozole y tamales, los protagonistas de la mesa de fin de año

MORELIA, Mich., 30 de diciembre de 2018.- La cena de fin de año es la principal protagonista de esta celebración que reúne a familias y amigos para desearse un próspero año nuevo.

Puede haber una gran variedad de exquisitos platillos o recetas poco convencionales, pero en Michoacán, platillos mexicanos como el pozole y los tamales, serán los favoritos para este festejo.

Aunque aún no ha elegido el menú para la cena de este año, la señora Patricia Arellano tiene claro que en su familia será algo muy típico, y que no podrá faltar el tradicional ponche de frutas.

“Pozole o tamales, nos juntaremos en casa unas 15 personas, nos cooperamos entre todos y quien pone la casa le toca hacer la cena, yo calculo que nos saldrá en unos 2 mil pesos”, compartió.

Don Eliseo Salinas es originario del estado de Hidalgo pero recibirá el Año Nuevo en la capital michoacana rodeado de los familiares de su esposa, cuidando siempre que los gastos de la cena no se disparen tanto para cuidar la economía.

“Vamos a hacer un convivio con la familia, a preparar tamales, ponche y comida tradicional de Michoacán como enchiladas y pozole, queremos pasárnosla bien, estar contentos y alegres porque viene un año más y tenemos que recibirlo con gusto”, mencionó.

“Pensamos preparar tamales, pozole y comprar pollo. Nos vamos a reunir siete hermanos con sus respectivas parejas, hijos y nietos, y mi mamá que gracias a Dios está aún con nosotros, somos más de 30”, dijo Yolanda García.

Ella y su familia se reunirán en el municipio de Atapaneo, de donde es originaria y aunque radica en el estado de Arkansas, Estados Unidos, aprovechó la temporada vacacional para visitar a los suyos.

Yunuén Ávalos es originaria de la capital michoacana pero ahora vive en Barcelona, España, y como cada año, ha viajado desde el viejo continente para empezar el año en familia.  

“Vamos a cenar en familia y queremos preparar pozole. No puede faltar el ponche de frutas y un rico postre. Somos cinco hermanas con nuestras parejas e hijos y durante la noche rompemos una piñata”, indicó.