Atropellan a una mujer frente a Costco, Morelia
MORELIA, Mich., 18 de junio de 2019.- Frente al estigma, el rechazo social y la desinformación, decenas de niños y adultos que padecen algún Trastorno del Espectro Autista (TEA) llegan a ver frustrada la posibilidad de una atención oportuna, a lo que se suma la escasa presencia de paidopsiquiatras, psiquiatras infantiles de los que en Michoacán no hay ninguno en el sector público.
En entrevista con Quadratín, en el marco del Día del Orgullo Autista, el médico psiquiatra Carlos Alberto Bravo Pantoja, subdirector del Hospital Psiquiátrico de Morelia, explicó que el autismo debe ser considerado un trastorno del desarrollo, y no una enfermedad, y debido a que hay varios tipos se debe hacer referencia a Trastornos del Espectro Autista.
El espectro autista abarca distintos tipos de sintomatología y manifestaciones, no se conocen las causas del trastorno del espectro autista, y entre éstos se identifican: el síndrome de Asperger o el trastorno generalizado del desarrollo no especificado, y las personas que tienen esta condición tienen conductas que suelen ser muy diversas.
Detalló que entre las principales sintomatologías del TEA destacan dificultades en la comunicación y en la interacción social y conservación de humanas; aprendizaje, un repertorio de intereses y dinámicas de repetición de actividades.
“Sí es un problema médico, lamentablemente el escepticismo respecto a los problemas mentales siempre ha existido y siempre va a existir, pero afortunadamente la ciencia no está sujeta a creencias, sino a la evidencia científica de este tipo de trastornos generalizados del desarrollo”, comentó el psiquiatra.
Se considera que al menos uno de cada 130 a 160 niños padecen algún Trastorno Del Espectro Autista, pero la estadística es difícil de precisar debido a que muchos padres no llevan a sus hijos a recibir atención.
Antes de su extinción, el Centro Michoacano de Salud Mental (Cemisam) llegó a tener alrededor de 50 pacientes con autismo, quienes al cierre de esa dependencia fueron trasladados al Hospital Psiquiátrico, donde este año se han recibido cuatro casos.
Al estigma social y la ignorancia que priva en torno al TEA, se suma la ignorancia de los propios médicos, quienes por desconocimiento no saben identificarlo, lo que entorpece la posibilidad de elaborar estadísticas precisas.
“En la rama de la medicina en general hay un desconocimiento enorme sobre lo que es el autismo, en ocasiones hasta pediatras o médicos de otras áreas no lo saben identificar; y es que en cada niño se puede manifestar en etapas distintas”, explicó Bravo Pantoja.
A decir del especialista, normalmente el diagnóstico del Trastorno del Espectro Autista se puede hacer a partir de los tres años de edad, aunque hay casos en los que la sintomatología es clara desde el año y medio de vida, y algunos un poco más tarde.
“Lo primero que observamos es que hay un retraso en el desarrollo de algunas aptitudes, como desarrollar el lenguaje, socializar, retrocesos en cosas que el niño ya había logrado; conductas repetitivas, estar jugando lo mismo y lo mismo, o moviéndose de la misma forma”, explicó.
A decir del médico, se trata de un trastorno difícil de diagnosticar porque hasta la mitad de los niños con autismo pueden tener una limitación intelectual, por lo que muchas veces se confunde con retraso mental, cuando en los hechos son cosas distintas.
Comentó que en el sector salud: IMSS, ISSSTE y la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM) no cuenta con ningún paidopsiquiatra, psiquiatras infantiles especialistas en Trastorno del Espectro Autista, solamente hay tres profesionistas que tomaron cursos de esa subespecialidad formal.
“Quien tendría que atender a los niños con Trastorno del Espectro Autista sería un paidopsiquiatra, y esta área que es de psiquiatras infantiles se encuentra un poco limitada Nosotros en el Hospital Psiquiátrico tenemos dos psiquiatras que han tomado cursos de paidopsiquiatría, con ellos nos apoyamos porque claro que tienen toda la capacidad para identificar e iniciar un tratamiento, pero lo ideal es que se contara con el especialista”, dijo.
Comentó que a nivel nacional es limitada la oferta de paidopsiquiatras, ya que a nivel nacional entre 20 y 30 psiquiatras ya titulados buscan hacer esta subespecialidad, además de que se concentran en estados como la Ciudad de México, Puebla y Guadalajara, lo que centraliza la atención.
El subdirector del Hospital Psiquiátrico hizo notar que hay mucha ignorancia y desinformación sobre el tema, por lo que los propios padres se niegan a aceptar un diagnóstico de TEA.
Ejemplificó que recientemente dio un diagnóstico de autismo a un menor, y sus propis padres se negaron a que se le brindara atención, expresaron temor y negativa y exigieron el cierre del expediente en la Secretaría de Salud.
“Hay una gran desinformación y desconocimiento, y esto lleva al miedo de que se piense que se le va a estigmatizar de por vida, y desafortunadamente sí pasa en muchos casos, porque en la mayoría de las escuelas: públicas y privadas, los profesores no cuentan con la capacitación para ayudar a estos niños a llevar un desarrollo académico satisfactorio”, comentó.
Señaló que hay muy escuelas que llegan a tener personal capacitado en el tema, por lo que en su mayoría son niños que llegan a sufrir mucho rechazo social, escolar y a veces hasta familiar.
En el caso de los niños con síndrome de Asperger, los menores pueden ser irritables, poco tolerantes, explosivos y requieren tratamiento pero este tipo de conductas los llevan a tener complicaciones para socializar y entablar relaciones humanas.
“La ignorancia a veces se extiende demasiado, a lo que se suman mitos principalmente cuando se ve la pérdida de capacidades previamente desarrolladas, entonces se buscan culpables; hay muchos mitos, el más común es la falsa y mentirosa creencia de que las vacunas generan autismo”, reprobó.
Cuestionó que hay mil 200 artículos científicos que han demostrado que las vacunas no generan autismo, hay quienes todavía creen en ese mito surgido en 1983, por lo que rechazan vacunar a sus hijos, y comentó que esto ha llegado a verse también en Michoacán.
El médico explicó que las personas con Trastorno del Espectro Autista pueden llegar a tener una vida adulta, aunque sí tendrán dificultades en el aprendizaje y desarrollo, no todas las condiciones son igual de incapacitantes, existen alternativas y buenos resultados si se brinda una atención temprana y adecuada.
“Algo fundamental es perder el estigma y el miedo, porque son personas que requieren atención profesional pero sí pueden llegar a desarrollarse en muchísimas áreas, mejor en unas que en otras, no es algo que deba ser motivo de vergüenza, lo que tenemos que hacer es orientar a la familia y a la sociedad para que no se trunque una atención oportuna”, dijo.