Tigres de arena

Xóchitl Gálvez Ruíz fue postulada por los tres partidos que conforman la coalición “Fuerza y Corazón” tras haber sido electa en un proceso inédito entre más de una decena de aspirantes tanto partidistas como ciudadanos. Uno de esos partidos que construyeron esta coalición —que tuvo como antecedente a VaXMéxico— fue el Partido Revolucionario Institucional, mismo que hoy ha arropado la candidatura a la presidencia de la República de la senadora con licencia.

Desde el momento en que Xóchitl asumió como coordinadora del Frente Amplio por México, la base militante del P.R.I. hizo suyo el compromiso de promover su figura a lo largo de la extensión territorial que tiene este partido en todo el país. De acuerdo a cifras avaladas por el I.N.E., el P.R.I. cuenta con más de un millón cuatrocientos cuarenta mil priistas en las 32 entidades federativas, lo que da una representación bastante importante para promover el voto a favor de la hoy candidata presidencial.

Si bien durante el año más reciente se ha generado una narrativa dualista entre sistema de partidos y sociedad civil, en la práctica ambas partes han dilucidado que no existe tal división, ya que para formar parte de los partidos políticos primero se ejercen los derechos que se adquieren con ciudadanía y a su vez formar parte de los partidos políticos refuerza la condición ser ciudadano. La relación es de fortalecimiento mutuo no de choque entre ambos conceptos.

La candidata priista a la presidencia de la república es Xóchitl Gálvez Ruíz y los candidatos tricolores que hoy compiten por cargos en los tres órdenes de gobierno están buscando el voto a su nombre y el de ellos, en una cruzada inédita que está marcada por la valentía y la audacia de quienes han decidido jugársela por un país en llamas.

El proceso electoral más desigual y peligroso de la historia reciente está en curso y de aquí al 2 de junio centenares de miles de priistas estarán recorriendo las calles, las colonias, los barrios, los ejidos e irán hasta la comunidad más alejada para convencer a las personas de no tener miedo y salir a votar por una opción que representa el corregir el rumbo y recuperar a una nación que ha sido lacerada y lastimada hasta sus cimientos.

A título personal, como priista, me representa Xóchitl Gálvez y me representan genuinamente cada uno de los candidatos abanderados por mi Partido. Me representa su valentía, sagacidad, convicción y principalmente su lealtad hacia el propio P.R.I..

Hace cinco años los pronósticos de los agoreros eran muy negativos y hoy los hechos han demostrado que el Partido Revolucionario Institucional tomó las mejores decisiones para encarar el actual es escenario político y colocar el andamiaje que permitió edificar la coalición opositora.

La Fuerza y el Corazón de la coalición fue, es y será el P.R.I. y el corazón del priismo saldrá como cada tres años a dialogar y convencer al pueblo de México sobre el proyecto político que habrá de revertir los daños que ha causado el movimiento del inquilino de palacio. Quienes sacaron provecho del P.R.I. por ambiciones personales ya están fuera de éste y están encarando a la justicia o bien cobijados por el manto corruptor de la farsesca transformación.

La entereza de los priistas llevarán a Xóchitl a la presidencia y con ello se abrirá una nueva época en la historia nacional.

Hasta la victoria siempre unidos.

Bismarck Izquierdo Rodríguez

Secretario de Cultura del CEN del PRI

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