Tigres de arena

PRI: 95 años

“Democracia y libertad o dictadura. Vida o muerte. Construcción o destrucción.

Libertad o privación. Verdad o mentira.

Sólo hay dos caminos.

Pero para nosotros, sólo hay un camino, sólo hay una opción, la que representamos con el PRI, la que representa Fuerza y Corazón por México, y la que representa, sin duda, con el apoyo de ustedes, la próxima Presidenta de México: Xóchitl Gálvez Ruiz.”

Alejandro Moreno Cárdenas

El pasado lunes 4 de marzo se celebró una sesión más del Consejo Político Nacional del Partido Revolucionario Institucional donde se conmemoró con una entrega de reconocimientos a militantes el aniversario número 95 de este partido político y el cual permanece como un ente clave para entender el sistema político mexicano.

El PRI llega a 95 años de vida en un contexto inédito de la vida política nacional, ya que se ha iniciado la carrera electoral a nivel federal y por primera vez los tres partidos tradicionales del sistema se unieron para postular a una candidata de unidad a la presidencia de la república. En pleno 2024, la condición aliancista se ha normalizado e inclusive se postra como imprescindible en el futuro próximo en función de sus resultados y efectividad.

Lo anterior hace cuatro años fue muy criticado y se olvida que fue el PRI que encabezan Alejandro Moreno Cárdenas y Carolina Viggiano Austria el partido que impulsó esta coalición para hacer frente al fársico autoritarismo del partido que ocupa todavía Palacio Nacional.

La alianza que primero se constituyó en una coalición legislativo-política como Va X México devino en Fuerza y Corazón por México y hoy se configura como el último bastión político para frenar los delirios de poder de la falsa transformación y su peligroso movimiento.

Se votaron en contra las retrógradas reformas oficialistas durante esta legislatura y se votarán en contra las reformas propuestas el pasado 5 de febrero por el presidente de México; desde Fuerza y Corazón —encabezada por Xóchitl Gálvez— se ofrece una postura realista y una alternativa de país en contraste a todo lo que ya se ha sufrido y perdido durante este sexenio.

Por otro lado, el PRI resistió el embate oficialista, la persecución, la represión y el acoso sistemático durante esta administración federal y contra todo pronóstico de agoreros pesimistas sacó adelante una compleja agenda legislativa y fue clave para que la frágil gobernabilidad del país no se rompiera.

95 años de historia no se relatan de manera sencilla y el PRI al día de hoy es ineludible para explicar el origen, desarrollo y evolución del fenómeno político de México. Con sus aciertos, sus errores, sus momentos brillantes y también los que han sido juzgados por la ciudadanía, el PRI se mantiene como un partido referente a nivel nacional con más de un millón cuatrocientos mil militantes y con registro en las 32 entidades federativas.

Cada tres años los detractores y críticos del mismo lo colocan en una ficcional debacle y hundimiento que termina por disolverse al momento de ir a las urnas. El PRI es un fenómeno cultural, filosófico, transgeneracional y popular; asimismo, es un fenómeno dinámico que se ha sabido adaptar a los cambios que necesita México. Por esas y otras razones más el PRI tiene vigencia y actualidad.

Finalmente, en el marco de la elección más importante del siglo XXI el PRI está de pie y firme para seguir dando la cara por los mexicanos y apoyando a Xóchitl Gálvez Ruíz y a todos los candidatos aliancistas.

Un PRI fuerte y unido siempre estará al servicio de México.

Larga vida al Partido Revolucionario Institucional, el partido de México.

Bismarck Izquierdo Rodríguez

Secretario de Cultura del CEN del PRI

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