Segunda circunscripción

El arranque del proceso electoral está prácticamente en la antesala de lo que será, sin lugar a dudas, uno de los ejercicios electorales con mayor atención de los medios. Se prevé que, de la misma manera, la participación social sea otro de los factores positivos para tomar decisiones importantes en las urnas y, de esa forma, la transición se distinga precisamente por eso, ya que es un desarrollo en el que las mayorías, como sucedió en 2018, saldrán y decidan libremente con el mecanismo puesto sobre sus manos en una boleta electoral. Eso definirá, además de la presidencia de la República, nueve entidades federativas y ambas cámaras legislativas, lo mismo que miles de ayuntamientos y congresos locales.

Se sabe que, una vez finalizado este proceso de organización, Claudia Sheinbaum, ganadora de la encuesta, se convertirá en la candidata oficial de Morena, y, como hemos podido observar en las encuestas, la favorita para ganar el escrutinio público a lo largo y ancho del país. De hecho, la capacidad que ha demostrado el lopezobradorismo- para ir ganando terreno- es realmente impresionante. Incluso, es muy fácil de entender ese fenómeno que acontece. Entre los principales detonantes está, por supuesto, la decadencia que vive la oposición que sigue manteniendo esos bajos niveles de argumentación y debate. La misma Xóchitl Gálvez es el mayor ejemplo de una apuesta fallida y, hasta cierto punto, desesperada por conectar con la sociedad.

Por tanto, hemos concluido, en este momento, que Morena ganará la elección presidencial y, en ese sentido, Claudia Sheinbaum dirigirá, a partir de octubre del 2024, los destinos del país desde Palacio Nacional. Su gran ventaja en las encuestas son el mayor ejemplo, aunque, de igual forma, su estructura territorial es muy superior a cualquiera. Tiene en su poder, ni más ni menos, un equipo experimentado y sagas para encarar la contienda. Desde que sumó a Ricardo Monreal, a la coordinación de la campaña, supimos del nivel que le garantiza el zacatecano, pero más aún, de la capacidad para resolver cualquier contratiempo con esa habilidad que dispone para dialogar y alcanzar acuerdos.

Y como Ricardo Monreal será pieza clave del triunfo de Morena, al equipo territorial de campaña, en las cinco circunscripciones geográficas del país, se ha sumado gente de mucha experiencia política, especialmente en procesos electorales. Eso nos hace pensar que, por cualquier ángulo que se le vea, Claudia Sheinbaum le apuesta a conquistar todos los puntos del territorio nacional. Incluso, hay condiciones políticas para alcanzar esos objetivos y, con ello, lograr metas que, tiempo atrás, lucían complejas.

La segunda circunscripción, por ejemplo, tendrá estados claves como Aguascalientes, Coahuila, Guanajuato, Nuevo León, San Luis Potosí, Tamaulipas y Zacatecas. Varios dirán que, muchos de esos puntos del país, son bastiones del PAN, sin embargo, es un hecho que Morena ha ganado presencia en cada una de ellas. De hecho, gobierna tres entidades y, para este proceso, tiene muchas chances de conquistar Guanajuato. En ese sentido, fue muy atinada la llegada de Néstor Núñez, quien, como sabemos, tendrá a su cargo la coordinación. Eso es justamente uno de los temas que ha llamado poderosamente la atención, pues, desde una perspectiva de competitividad, el exalcalde de Cuauhtémoc garantiza eficiencia para poder llevar el ejercicio a otras latitudes.

No es un secreto a voces el crecimiento que ha tenido Morena en Nuevo León, Aguascalientes, Coahuila y Guanajuato. Es verdad, hace poco se perdió uno de los estados del Norte, por la salida de Mejía, sin embargo, la unidad desde el centro del país influirá, sumada a la buena gestión del coordinador de la segunda circunscripción. Lo mismo pasará en Guanajuato. De hecho, en este momento, de acuerdo con la encuesta que divulgó Demoscopia Digital, el lopezobradorismo está por encima del PAN. No debiera de sorprenderlos, luego del pobre nivel que ha mostrado la derecha.

De igual forma, es posible conquistar ese punto, dado el nivel de decepción de la mayoría de la población en Guanajuato por el PAN. Basta ver lo que pasó en el Estado de México, que jamás se imaginaron que habría alternancia y, para sorpresa de muchos, Morena le arrebató al PRI, la joya de la corona. Con ese mismo efecto puede correr el panismo si sigue creyéndose invencible. No lo es y, por tanto, en este momento, todo indica que el lopezobradorismo dará el campanazo en Guanajuato, pues, ante los ojos de todos, ha mostrado poder de convocatoria.

Para ello, la segunda circunscripción será crucial.