Santiago y el Rufo

No se queje, haga cosas

Algo que no me gusta del Internet, es que me llegan correos muy ingeniosos sin hacer referencia al autor, que siempre merecen reconocimiento y crédito.

S- Con respeto a sus autores, me permito reproducir dos de ellos que en lo general comparto:

Primero el titulado: Un día en la Cámara de Diputados.

Van pasando dos compadres frente al palacio legislativo y de repente oyen gritos desde dentro del  recinto: ¡Flojo!, ¡Ignorante!, ¡Ladrón!,  ¡Violador!, ¡Maricón!, ¡Degenerado!, ¡Ratero!, ¡Come  mierda!, ¡Sinvergüenza!, ¡Vende patria!,  ¡Descarado!, ¡Hijo de…!, ¡Hulero!, ¡Estafador!, ¡Burro!, ¡Inepto!,  ¡Desgraciado!…

Entonces le dice el uno al otro: -Óyelos compadre, ya se armó la bronca; el otro contesta: -No seas tarugo compadre, solamente están pasando lista…

R- Guarf, guarf, guarf… Te pasas, mi Santias, pero tienes razón, yo también comparto que, salvo honrosas excepciones, lo expresado si parece lista de asistencia del congreso… Guarf, guarf, guarf.

S- Es verdad, salvo honrosas excepciones, tenemos políticos, gobernantes y congresistas inservibles y egoístas que solo ven por los intereses de los partidos políticos, de sus corrientes y grupos, y de sus cómplices y parientes… Cuando no del interés de mecenas y narcos que financian sus campañas.

R- Grrr, no puede ser de otra manera cuando la ciudadanía acepta que los partidos pongan como candidatos y futuros gobernantes a una runfla de lumpen´s ineficaces y muchos de ellos corruptos. Y cuando aceptamos un modelo antidemocrático con un referí de pacotilla como en mi opinión lo es el Tribunal Electoral.

S- Por eso es oportuna la pregunta del segundo correo:

-¿No le gusta el país en el que vive?

¡Cámbielo usted mismo!… Y si no participa… ¡No se queje!

-¿Encuentra absurdo el robo de camiones de carga, a veces hasta con asesinatos de los camioneros?

Solución: Exija la factura en todas sus compras.

-¿Usted encuentra absurdo el desorden causado por los vendedores ambulantes?

Solución: Nunca compre nada a ellos. La mayor parte de sus mercaderías son productos robados, falsificados o contrabandeados.

-¿Usted encuentra absurdo el enriquecimiento ilícito?

Solución: No lo admire, ni lo practique; repúdielo y no dé mordidas ni pequeñas ni grandes.

-¿Usted encuentra absurda la cantidad de mendigos y lava vidrios en los semáforos y/o en cada esquina?

Solución: Nunca les dé nada. Canalice su ayuda solidaria directamente a las instituciones de su confianza. (Pero, si no cumple con lo segundo, no se sienta bien haciendo lo primero, no sirve para justificarse, sea honesto consigo mismo)

-¿Usted encuentra absurdo que las lluvias inunden la ciudad o que la ciudad sea un basurero?

Solución: Solamente tire papelitos y basura, en los canastos de basura, barra su banqueta y si construye, no eche la basura en las coladeras…

-¿Usted encuentra absurdo que haya revendedores de entradas para espectáculos?

Solución: No les compre, aunque eso signifique perderse el evento. Mejor trate de comprar con oportunidad y haga cola, no se pase de listo.

-¿Usted encuentra absurdo el tránsito en su ciudad?

Solución: Nunca cierre el paso, respete las normas, estacione en los lugares habilitados, practique la técnica de paso ‘uno por uno’, traté de usar menos el auto y use el transporte público cuando pueda.

Estamos pasando por una etapa de falta de cultura ciudadana y de patriotismo. Necesitamos cambiar nuestro comportamiento para que podamos vivir en un país donde tengamos el orgullo de decir: ¡Yo soy mexicano!

Quedándonos quietos, sin hacer nada, no contribuimos; por lo tanto, no podemos reclamar… Así de sencillo.

Un saludo una reflexión.