Queso Cotija modelo nacional/Alfredo Ramírez Bedolla

QUESO COTIJA MODELO NACIONAL, INMINENTE DENOMINACIÓN DE ORIGEN EN EUROPA.

Queso Cotija orgullo de Michoacán y Jalisco, reconocido en 2006 como el mejor del mundo en Cremona, Italia, armado de su historia ranchera, su paso constante en salvaguardar la cultura del queso artesanal, auténtico, ancestral, tradicional y de rancho, volverá a ser ejemplo a nivel nacional en la industria láctea, próximamente  la Unión Europea le concederá protección en calidad de Indicación Geográfica (Denominación de Origen, como el Tequila), es así que ya fue publicado en el Diario Oficial Europeo con fecha 20 de octubre de 2017 la solicitud de dicho registro a la par de otros 20 diversos productos mexicanos. Con ello será el primer queso mexicano con dicho reconocimiento y registro en materia de propiedad intelectual.

México ha experimentado, desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, una industrialización sin control en la industria láctea, el mercado mexicano está invadido de productos lácteos que distan mucho de contener leche, si, así como se escucha, lácteos que no son elaborados en base a leche de vaca, estos productos son en base a fórmula láctea elaborada artificialmente así reconocida por la norma oficial mexicana. Un alto porcentaje de los quesos que se ofertan en los supermercados son elaborados con productos sustitutos o análogos (algo así como un “clon” en la piratería de películas), elaborados a base de grasas vegetales, gomas, harinas, poco tienen ya de lo que se conoce como queso. Lo anterior tiene su aspecto económico directo que lo alienta, en primer lugar a partir del TLCAN se permitió la importación de leche, leche en polvo, suero en polvo, grasa vegetales e insumos  a muy bajo precio; insumos de baja calidad pero muy baratos, frente a ello la ganadería lechera que en los años 80 atravesaba por una severa crisis, México nunca ha sido autosuficiente en producción de leche y lácteos, la importación a gran escala de los productos sustitutos de leche, generó una gran expansión de marcas mexicanas de la industria láctea, que en consecuencia dejó sin mercado a los productores de leche entera de vaca, estos fueron desplazados y prácticamente se extinguieron, ya no vemos en las ciudades ni en los pueblos al lechero, este fue sustituido por la leche en caja de empresas con marcas famosas o notorias.

Aún con los 20 años a cuestas del TLCAN y su impacto adverso a los pequeños productores de leche y queso, estos han logrado sobrevivir, en referencia el “Atlas de los quesos mexicanos genuinos, 2014” publicado por el colegio de postgraduados de la Universidad de Chapingo enlista 30 quesos genuinos mexicanos, destacando el Queso Cotija, mismo que en 2004 logro ser el primer queso en Latinoamérica con Marca Colectiva Región de Origen, lo siguió el Queso Poro de Tabasco, no obstante prevalece la “piratería” de quesos y señalo que esta desleal práctica la ejecutan las grandes empresas amparadas por sus marcas famosas, práctica fraudulenta que engaña al público consumidor, ya que usan ilegalmente la denominación del Queso Cotija, lo señalo con pruebas y conocimiento de causa, ejemplo de ello la marca Esmeralda propiedad de la francesa Lactalis -envuelta en el escándalo por la presencia de Salmonela en sus productos a nivel mundial-, de igual forma grupo Lala tiene su propio Queso Cotija pirata.

Oportunidad que brinda la renegociación del TLC con Europa

Los europeos le han puesto el cascabel al gato en el tema de los quesos análogos –prefiero nombrarlos clones-, ya que dentro de la renegociación  del tratado de libre comercio con Europa se plantea el tema de las Indicaciones Geográficas, por lo que Europa exige se deje de utilizar las Indicaciones Geográficas de quesos europeos, entre ellos el queso Manchego, ya que este es originario en exclusiva de la región de la mancha España o el mozzarella italiano, a esto se le ha nombrado en la prensa especializada como la guerra de los quesos.

La práctica desleal de la industria láctea mexicana no solo afecta a productos europeos, golpea y mantienen en la marginalidad a los auténticos quesos artesanales mexicanos, es un reprobable modus  operandi de la industria láctea nacional, es preciso y pertinente corregir dicha práctica, la propia industria láctea mexicana está ante una oportunidad para resarcir la afectación en el caso nacional y ser verdaderas empresas socialmente responsables, los gobiernos y productores deben fomentar e impulsar la generación de Denominaciones de Origen y Marcas Colectivas de los quesos mexicanos auténticos.

Tenemos a la vista la oportunidad de retomar y reactivar la producción de nuestros propios quesos, con sus respectivas Indicaciones Geográficas, restablecer las cadenas agroindustriales a nivel regional, la pertinencia está a favor de los quesos mexicanos genuinos como el Queso Bola de Ocosingo, Asadero de Aguascalientes, el Tepalcatepec o Tepeque, Chipilo y muchos más.

A la vista de China, ya tiene muy avanzadas las negociaciones con Europa para reconocer la figura comercial de Indicaciones Geográficas, necesario trabajemos en dicho sentido para nuestros productos auténticos.