Perfiles/Arnulfo Mora

Itzé Camacho no ganó por sí misma la elección pasada. Ganó Morena gracias a la “ola” generada por el hoy presidente electo. Esto no demerita para nada el triunfo de la ya alcaldesa en funciones. Lo considero parte de lo complejo que es la política. El triunfo de la primera mujer presidente en este municipio es producto del tino y de las circunstancias. Ya en el ejercicio del poder esto también tiene ventajas, pero las mismas pueden convertirse en desventajas si no hay cálculos bien definidos en el ejercicio del gobierno.

En mi opinión podría ser ventaja el que Itzé Camacho no haya hecho una campaña a profundidad para ganar el poder, pero las circunstancias la hicieron ganar.

Esto hace parecer que no lleva compromisos concretos con los ciudadanos. Más sin embargo, opino que al ganar, nace un compromiso mucho mayor porque los ciudadanos esperan de la primera alcaldesa nuevas formas de gobernar y que brinde resultados casi de inmediatos.

Esa fue la oferta de Morena para todo el país, y quienes ganaron la elección tienen el paquete de no eludir, al contrario, reasumir y hacer suyo el sentir mayoritario.

Luego entonces; la oferta de cambio de Morena rebasó con mucho la candidatura de Itzé Camacho, la ola la hizo ganar y hoy no debe eludir el compromiso.

Por eso mi percepción de lo complejo del sentido del voto, y la difícil tarea de ejercer el poder. El nuevo gobierno no debe dar espacios al desánimo de los ciudadanos. El nuevo cabildo y los nuevos funcionarios no deben dar espacios a los mínimos escándalos públicos porque como jamás antes están vigilados por cientos o miles de miradas, sobre todo, de esa ola morenista que los llevó al poder.

En lo personal aprecio que Itzé Camacho es una mujer bien intencionada y comprometida a dar lo mejor de sí misma. Pero eso no basta para satisfacer lo que los ciudadanos esperan del nuevo gobierno. La alcaldesa debe compactar muy bien su equipo de trabajo, y cuidar no provocar confrontaciones con el órgano de gobierno.

Ser guía del cabildo, y ser líder de su equipo es requisito indispensable para no perder el control, y para evitar desgastes prematuros.

Pero la sociedad, y sobre todo los grupos organizados, no deben ser ajenos a los cambios que reclaman y que requiere el municipio. No podemos dejar a la administración a que sola haga esos cambios.

Si realmente queremos mejoras, tan fácil pero indispensable es que debemos cambiar la forma de actuar los ciudadanos.

No esperemos poner a prueba a la autoridad, pongámonos a prueba todos y el tránsito a los mejores resultados será más fácil de llegar.

Ya se leen y se escuchan críticas a los nuevos funcionarios y apenas llevan diez días o menos en sus cargos. No es malo llegar y no saber. Nadie llega sabiendo. Nadie es experto en todo porque no hay manuales que le indiquen al funcionario como hacer mejor su trabajo.

Evitar la descalificación prematura debe ser una conducta ciudadana. Que no sea un problema ciudadano el enojo de los que no han logrado cargos públicos. Es común y hasta normal que eso suceda.

Es ahí donde la alcaldesa debe evitar perder el control de su administración.

Itzé Camacho ya pasó la primera prueba de la mano del síndico y los regidores al nombrar Secretario y Tesorera sin mayor problema. Pero se atoraron en la designación del Contralor. Se sabe que este lunes presenta dos propuestas en nueva sesión de cabildo en el que hay mayoría de Morena, uno del PRD, una del PAN, una del PRI y uno del PT.

Suman pues una docena en total, más el síndico y la alcaldesa con voto decisivo en caso indispensable

Se anticipa que no habrá unanimidad entre los regidores, incluyendo algunos de Morena que han expresado ya desacuerdos entre sí y con la alcaldesa.

No habrá pues satisfacción colectiva para designar el Contralor. Pero el problema no solo es eso. Al desencuentro se abona por los perfiles de los que van de candidatos por parte de la alcaldesa.

Se sabe que uno es el ingeniero Alfonso Castillo Abogado, de la asociación Civil Ciudadanos por la Transparencia. Se dice que el otro candidato de Itzé Camacho es un personaje foráneo directamente enviado por influyentes opiniones desde la parte central de Morena.

Castillo Abogado se hace impulsar desde la iniciativa privada, en la que respetuosamente, no juega papel alguno. Algo así como por no tener trabajo, se le propone por algunos empresarios. Pareciera que les es incómodo en el sector y quieren que mejor le sea incómodo a la administración municipal.  Quizá sea también estrategia oficial: “rechazan a Castillo y al no haber más tienen que aprobar al foráneo”.

Advierto que jugar así lleva muchos riesgos, y están generando próximos problemas donde no debiera haberlos. Insisto, no se deben apresurar desgastes prematuros.

CON EL ENEMIGO DENTRO

Desde antes de asumir el poder esta administración, hubo, y aún ahora hay afirmaciones de que está pactada la salida del Síndico, Miguel Ángel Peraldí. “En un mes saldrá el síndico, y no llegamos al primer año cuando saldrá también Itzé Camacho”; afirmó y afirma un personaje que es parte del equipo de funcionarios municipales.

LA COMUNICACIÓN OFICIAL

La comunicación del gobierno es esencial para darles cuenta a los ciudadanos de las acciones oficiales. Comento esto porque hubo rumores de que desaparecería el departamento de Comunicación Social. Qué bien que rectificaron y haya continuidad.

Aprecio que la nueva titular de esa área asume el compromiso de dar lo mejor de sí y como tal ofrecer buenos resultados. Por experiencia personal, sostengo que requiere tener fácil acceso a las actividades de la alcaldesa y de esta se ocupa su total confianza. Yo estimo que si se compacta el equipo en la administración, y sí los ciudadanos nos comprometemos a hacer nuestra tarea, habrá buenos resultados en favor del municipio. HASTA LA VISTA.