La responsabilidad de coordinar las decisiones legislativas
El proyecto de la Cuarta Transformación seguirá echando raíces en los próximos seis años. Esa lectura es muy clara, pues Claudia Sheinbaum, como coordinadora de los comités, será la candidata de Morena y futura presidenta de México. De hecho, con la permanencia de Marcelo Ebrard, y el éxito de los coordinadores en las nueve entidades federativas, el partido guinda encontrará un punto de solidez para encarar el ejercicio electoral, siendo el favorito para conquistar el mayor número de posiciones que estarán en juego.
En pocas palabras, hay certeza para ir garantizando triunfos importantes, lo mismo en espacios legislativos que, para este proceso, ha sido clave su labor, especialmente al consolidar una agenda de leyes y reformas constitucionales que son, sin lugar a dudas, el pilar del proyecto de nación que encabeza el presidente Obrador. Incluso, ese quehacer lo han resaltado todos. Por ejemplo, fue sumamente crucial el papel que llevó a cabo Ricardo Monreal, durante su paso como líder y presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República.
Recuerdo el nivel de debate que se propició, pero sobre todo el respeto a la labor legislativa. Durante cinco años consecutivos, Ricardo Monreal, con esa capacidad política que le caracteriza, hizo posible impulsar una agenda de rubros que, de hecho, fueron propuestos por el ejecutivo federal. Todos, sin excepción, llegaron a buen puerto. O sea, fue una tarea que, de manera minuciosa y quirúrgica, elaboró el zacatecano durante su lapso como líder. En efecto, debemos de contemplar que, en muchas ocasiones, Monreal siempre encontró puntos de acuerdos, inclusive con las minorías, a las que trató con respeto.
Y, cuando su responsabilidad llegó a su fin, supimos que, en esa ardua labor, se necesitaba un perfil con esas características políticas. Alguien que, en todos los sentidos, tuviera esa visión no solamente para conducir las tareas de coordinación, sino para resolver problemas y, de paso, encontrar soluciones de beneficio colectivo. Fue muy claro: la llegada de Eduardo Ramírez, como líder senatorial, significó una decisión muy atinada. Incluso, rápidamente encontró el hilo conductor para guiar las directrices. De igual forma, ha mantenido cohesionada a la fracción y, con gran sagacidad, se ha convertido en un referente.
Eso, claro está, lo fortaleció de cara a la decisión de los coordinadores de las nueve entidades federativas. Como sabemos, Eduardo Ramírez, presidente de la Junta de Coordinación Política, ganó la encuesta interna de Mora. Siempre supimos que, en cualquier momento, ese nombramiento se iba a llevar a cabo. Y así fue: el pasado fin de semana, ante la opinión pública, se dieron a conocer los resultados y, con esa lógica, el Jaguar Negro será el abanderado en Chiapas y futuro gobernador constitucional. Eso significa que, dentro de unas semanas, habrá nuevamente ajustes y las piezas del ajedrez se moverán.
Es muy probable que Eduardo Ramírez termine este periodo legislativo que está en marcha. Siendo así, será hasta la segunda semana de diciembre cuando el coordinador de los senadores solicite licencia para separarse del cargo. Dejará, sin lugar a dudas, un gran legado y una enorme responsabilidad al sentar un precedente importante. De hecho, sabemos que- a través de la interlocución de Mario Delgado- el presidente López Obrador está muy satisfecho con el trabajo de Ramírez.
Hablamos de una labor que conlleva gran responsabilidad, pero sobre todo liderazgo y sagacidad. No cualquiera lo puede llevar a cabo, por lo que será muy interesante encontrar alguien de ese mismo nivel, pues el Jaguar Negro, como lo conocen, dejará un vacío enorme.
En vista de esa enorme cualidad que tiene Eduardo Ramírez para consensuar y alcanzar acuerdos, se requiere de un perfil que sepa operar los temas con esa capacidad creativa. Se habla de muchos perfiles, sin embargo, aún no hay nada concreto que nos pueda acercar al futuro líder de los senadores de Morena que, como sabemos, ha sabido elegir, primero, con Ricardo Monreal. Con esa visión, un gran acierto fue, sin lugar a dudas, llevar a Ramírez, con todo el respaldo total de la bancada que le sigue dando su voto de confianza.