Escuela para pobres

 

Grrr… Me gustó tu artículo sobre la pobreza, mi Santias y me queda claro que al gobierno le corresponde ver la forma de incorporar a los pobres en el sector productivo, pero...

S- Mi Rufo. No hay pero que valga, así como lo ladraste debe ser y te recuerdo: “…en esta sociedad deshumanizada, los emprendedores, comerciantes, negociantes y empresarios van por la ganancia; y para obtener utilidades prefieren a la gente preparada y ya entrenada, por lo que los pobres sin escuela no tienen cabida en sus negocios y consiguientemente no consiguen empleo; eso solo deja tres salidas: 1- Que mueran de inanición, 2- El delito o 3- Que el gobierno se haga cargo e invierta en ellos para el presente y el futuro de México.

R- Guau, ese es el punto mi Santias, creo que no hay manera de ayudar a quienes siendo pobres no saben hacer nada, y si el gobierno se hace cargo, me temo que crearemos burocracia y una bola de vividores.

S- Te equivocas, perro, no creas a lo tarugo; si hacemos las cosas bien y ayudamos a cada mexicano a recuperar su dignidad y estima, el resultado será: Ganar/ganar… Este asunto del desarrollo social, si le quitamos la politiquería, es solo cuestión de güe… ¡Perdón!, de carácter y de trabajo organizado, inteligente y comprometido.

Deja y te recuerdo, mi Rufo, que hasta hace poco el analfabetismo en México y consecuentemente la ignorancia, eran muy altos; mira, en 1895 había seis millones de mexicanos mayores de 15 años que no sabían leer y escribir, que representaban el 82% y el país caminaba y se consolidaba hacia la modernidad; en el 2010 teníamos cinco y medio millones de analfabetas, aunque estos representaba solo el 7% de la población mayor de 15 años; desde entonces el número de analfabetas se ha mantenido en seis millones más o menos. El punto es: cuando el 82% de la población era analfabeta, el país caminaba con zapateros, herreros, carpinteros, agricultores, etc., es decir, la mayoría tenía un oficio que le permitía vivir aunque no tuvieran escuela; el problema de hoy es la exclusión, la modernidad y el modelo neoliberal han traído como consecuencia que las nuevas actividades económicas y sobre todo el empleo subordinado, tengan un mayor grado de sofisticación y requieran de estudios especializados, lo que tristemente no se está convirtiendo en mejores ingresos y por ende no trae un mejor nivel de vida a quienes estudian, lesionando mercados locales y regionales; ya que el mentado modelito, bajo la inmoral argumentación de “ser competitivos”, tiende a la reducción de costos que se reflejan en menores salarios (menos poder adquisitivo) para los trabajadores. A ello añadamos el sistema de tiendas de descuentos y grandes supermercados que en la práctica son monopolios que acaban con los pequeños negocios y el resultado es una clase media cada vez más pobre que se suma a los pobres ya existentes mientras una minoría se enriquece.

R- Auuu, en pocas palabras me pintaste la realidad nacional, mi Santias.

S- ¡No!, mi Rufo, te pinté la realidad mundial. El modelo está pintando de hambre y muerte al mundo, así vemos la quiebra de Grecia y el desempleo de España y la muerte en Siria mientras en USA hay marchas y quejas por el aumento de pobres y el ineficaz e inmoral sistema financiero y en Chile hay huelgas por el sistema educativo que discrimina… ¡Esto es mundial!, y solo los países con gobiernos humanistas y responsables están preparando a sus pueblos e instituciones para la debacle.

R- Guauuu, eso suena bien mi Santias, pero: ¿cuál es el inicio de la madeja?, ¿por dónde empezar?

S- En mi opinión, perro, por retomar la capacidad de producir nuestros alimentos en cada familia, es decir, enseñar a todos los mexicanos a producir alimentos, en tanto tengamos la barriga llena podremos enfrentar exitosamente y sin violencia social las dificultades. Si lo hacemos al parejo de enseñar oficios y proyectos productivos en los: Centro Escolar Comunitario (CDC), o como quieran llamarles; lugares en donde podrán aprender personas de cualquier edad y sin necesidad de estudios previos, la base ciudadana para sortear problemas internacionales la tendremos… La tarea nacional con un enfoque moral y humanista, debe ser: “Transitar a las personas del sector asistencial al sector productivo”, algo así como: “No les demos “piso firme”, démosles la oportunidad de ser productivos para que adquieran su piso firme”… ¿Te suena?, lo sé, se oye como a: “No le des pescado, enséñale a pescar…”, es decir, construir en cada mexicano un ciudadano digno que viviendo bien, aporta a la República. Ahora bien, si de pasadita el gobierno invierte en infraestructura para la producción regional, coordina distribución de productos, capacita y orienta en la atención a mercados y lleva tecnología e innovación a todos, como un servicio al pueblo, entonces te garantizo el éxito, aún dentro de las crisis. Lo sé, algunos considerarán esto como una competencia desleal del gobierno, a esos respondo: ¡Háganse cargo de los pobres, méndigos, no los exploten!, y de pasadita lean la Constitución Política de los estados Unidos Mexicanos, cito: Artículo 25. Corresponde al Estado la rectoría del desarrollo nacional para garantizar que éste sea integral y sustentable, que fortalezca la Soberanía de la Nación y su régimen democrático y que, mediante la competitividad, el fomento del crecimiento económico y el empleo y una más justa distribución del ingreso y la riqueza, permita el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los individuos, grupos y clases sociales, cuya seguridad protege esta Constitución…” ¡Así de sencillo!

Un saludo, una reflexión.

 

Santiago Heyser Beltrán

Escritor y soñador