Libros de ayer y hoy
Uruapan, Michoacán, 26 de diciembre del 2011.- Peña Nieto propone un pacto para que no entre dinero del narco a las campañas; pregunta: ¿Enrique, si no hay pacto si entrará dinero del narco?S- ¡Chinche Rufo!, te estás metiendo en camisa de once varas; la intención del candidato priísta es defender a México del embate del crimen organizado.R- Grrr, para eso no necesitamos de pactos, mi Santias, necesitamos simplemente cumplir la ley. El que un político pretenda que se firmen pactos, es muestra, a mis perrunos ojos, que el delito se comete y que hay que hacer cosas extraordinarias, como firmar pactos, ante la realidad lacerante de que nadie cumple la ley.S- ¿Nadie, mi Rufo?R- Auuu ¡Ya se!, me vas a decir que siempre existen excepciones y que las generalizaciones no son exactas, pero, desde mi perruna óptica, en esa tu sociedad de humanos nadie cumple le ley. Así tenemos a Rosario Robles declarando con cinismo en su columna en Milenio diario: “…sin duda un gran fortaleza del perredismo capitalino: su maquinaria electoral, el manejo clientelar de los padrones sociales (y) la operación política desarrollada desde el gobierno.” Es decir, el PRD en la capital está preparado para hacer trampas, como seguramente lo estarán el PAN en Jalisco y el PRI en Veracruz.S- Me dejas sin palabras, pero es cierto, en cuestiones electorales, todos son corruptos, unos por acción, otros por omisión. Sin embargo, quiero pensar que aun siendo todos los partidos instituciones corruptas y corruptoras, existen excepciones, es decir, políticos que son honestos.R- Guarf, guarf, guarf, no me hagas reír, mi Santias, que con este pinche frío tengo mis perrunos labios partidos, pero a ver, explícame: ¿Cómo puede un hombre (o mujer) decente, estar en un partido corrupto y ser honesto?, o más sencillo ¿Cómo puede un priísta ser honesto y ser correligionario de Arturo Montiel o de Moreira al mismo tiempo? ¿O cómo puede un panista ser decente y ser cómplice de Creel y del fraude al Fonden? ¿O cómo puede un perredista ser transparente y honesto y militar junto a Leonel Godoy y su narco hermano o ser compañero de Bejarano?S- Creo que te excedes, perro. Primero, el único camino para acceder a puestos de representación y de gobierno, es a través de los partidos políticos. Segundo, nadie es responsable de las acciones de otro. Tercero, tu puedes tener certezas de las tranzas de Oliva en Guanajuato o de Godoy en Michoacán o de Moreira en Coahuila, pero no todos saben o tienen constancia de dichas acciones, consecuentemente no consideran tramposos o deshonestos a sus correligionarios y obviamente, no se sienten cómplices.R- Auuu ¿Habrá algún priísta, incluyendo a Peña Nieto, que no sepa que Montiel es una rata de dos patas (Dehesa –dixit-)? Creo que pusiste la pata en la llaga, mi Santias: Complicidad, esa es la clave, muchos políticos se consideran leales al no señalar las corruptelas dentro de sus partidos o de sus compañeros y ahí se equivocan. Cuando un político calla o cubre las deshonestidades de sus correligionarios, no está siendo leal, ni con el partido ni con su compañero, lo que está siendo es cómplice.S- Sigo pensando que exageras al señalar a todos de corruptos, mi Rufo, entiendo que algunos son cómplices abiertamente y que otros lo son por callar o solapar, pero sigo con la idea de que muchos son ingenuos y no tienen idea de lo que realmente pasa dentro de sus partidos.R- Guau, así ni como argumentar, el que no es corrupto es pendejo, según tu dicho. Así ya no supe cual es peor, lo que si se es que de cualquier manera ninguno sirve, o por deshonestos o por idiotas… Y reitero, mal anda tu sociedad de humanos al aceptar ser gobernados por ilusos o por tranzas. No es de extrañar entonces, que “gente decente” se corrompa y corrompa las leyes simulando elecciones internas dirigidas a la sociedad en general; como tampoco debe extrañar el tener un Presidente que cierra los ojos ante los delitos de los norteamericanos, o jueces que no encuentran delito cuando les llegan al pre$io, o candidatos que anuncian en actos de campaña que no están haciendo campaña, o estudiantes que queman a un empleado de gasolinera y nadie investiga, o policías estatales que acusan de asesinos a policías federales, o soldados que difaman a estudiantes modelo para justificar su asesinato, o diputados que esconden en su oficina a un correligionario narco para que obtenga fuero e impunidad, o gobernadores que piden prestado y roban, dejando a su estado endeudado por décadas…S- Ya en ese tenor tendíamos que apuntar a los jueces que cobran emolumentos inmorales o congresistas que se dan aguinaldos impúdicos y no podríamos olvidar a empresarios que evaden impuestos, taxistas que cobran de más, curas violadores, comerciantes tranzas, publicistas mentirosos, abogados deshonestos, empleados güevones, maridos infieles e inspectores ladrones.R- Auuu, o sea, tranzas todos,… menos tu estimado lector.Santiago Heyser BeltránEscritor y soñador