¿Cumplirá las expectativas?

 

“Hay tres cosas que nuca vuelven atrás: la palabra pronunciada, la flecha lanzada y la oportunidad perdida”… Proverbio chino.

 

Indudablemente que Alfonso Martínez Alcázar, ha hecho historia al convertirse en el primer Presidente municipal independiente de Morelia, como él mismo lo destacó ayer enfáticamente en su discurso durante la sesión solemne donde rindió protesta.

Sin embargo, haber ganado la elección es sólo el primer paso de lo realmente importante para los ciudadanos, que sea una administración mucho mejor a las anteriores, donde conceptos como la transparencia, rendición de cuentas y participación ciudadana, dejen de ser fetiches de los discursos de cuanto candidato y gobernante quiere endulzar el oído de los ciudadanos.

Martínez Alcázar no es la excepción, también comprometió lo mismo e incluso destacó que a partir  de este martes primero de septiembre, “en la Presidencia se acabaron los sobreprecios, se acabaron los moches y se acabaron las comisiones”. Ojalá que semejantes compromisos alcancen al resto de los integrantes del Ayuntamiento capitalino y no sólo a la Presidencia; y ojalá que en cuanto haya evidencias de alguna irregularidad, no le tiemble la mano para sancionar.

Las expectativas de lo que podría ser la administración municipal de la capital, bajo el liderazgo de Alfonso Martínez, son enormes; por ello no puede engolosinarse con la luna de miel que vive con varios sectores de la población para que genere cuanto antes resultados, que incluyen, una auditoría minuciosa, contundente y transparente, a todo el sospechosismo que se generó con la ejecución de la obra pública realizada en la era Wilfrido Lázaro Medina y Salvador Abud Mirabent.

Sin pretender ser pesimista, me resulta importante invitar a los morelianos a no echar las campanas al vuelo, no basta con sólo elegir a un Presidente municipal presuntamente independiente. Justo el reto mayor de Martínez Alcázar es demostrar que efectivamente lo es, que no habrá privilegios para los clásicos grupos sociales y políticos de la ciudad.

Sirva como ejemplo señalar la inclusión en su gabinete de dos personajes, ex panistas, Antonio Plaza Urbina y Jesús Ávalos Plata, que no gozan ni gozaron de buena reputación con una parte importante de sus entonces correligionarios y otros sectores poblacionales. El argumento de Alfonso Martínez, es que no hay documento, indagatoria o sanción que culpe de alguna irregularidad a cualquiera de dichos personajes. Y tiene razón, porque el problema es que tampoco hay rendición de cuentas para ningún otro ex funcionario, o ex legislador michoacano, si acaso, la excepción que hace la regla es el nuevamente alcalde de Tarímbaro, Baltazar Gaona; así que todo queda en el ámbito de la sospecha y en ese ámbito ni a Plaza ni a Ávalos, les va bien.

En fin, hago votos porque que esta nueva oportunidad que tendrán algunos ex integrantes de partidos políticos, incluido Alfonso Martínez, les permita efectivamente hacer historia con el cobijo del concepto “independiente”.

Vale destacar que los personajes arriba mencionados ya han sido parte de administraciones y legislaturas y lamentablemente no tienen en su haber ejemplos contundentes de transparencia y rendición de cuentas, por ello es que los ciudadanos debemos estar pendientes y ayudarles a efectivamente reinventarse para hagan las cosas de mejor manera.

Por lo pronto, seguramente Alfonso Martínez y sus colaboradores más cercanos tienen en la mira competir por la gubernatura de Michoacán en 6 años y antes, buscar la reelección en Morelia; sólo eso debe motivarlos a llevar al terreno de los hechos, lo que ahora sólo es discurso, por más que sea un buen y adornado discurso de Presidente municipal independiente.

Seguramente también están ciertos que a mayor expectativa de la población, mayor exigencia; y sería lamentable que la oportunidad ciudadana a los independientes, termine hecha trizas en sólo un periodo gubernamental.

 

Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.

cmongem@hotmail.com