Itinerario político
A pesar de tantos intereses bastardos y de tantos vicios en nuestra sociedad, ausencia del estado de derecho, impunidad, mentiras, los mexicanos tenemos un enorme potencial y riqueza de recursos para construir un futuro de abundancia, bienestar y dignidad.
La grandeza de una nación con sabiduría, en base a hombres maduros que viven los valores universales como la verdad, objetiva y absoluta y la sencillez. La verdad del Estado no es idolatrarse y buscar aplausos si servir y dar su vida por los pobres.
No tenemos más que buscar en el sustrato cultural de México, profundo, milenario, enriquecido por la revelación de Dios en la historia, herencia de la cultura del Medio Oriente y del Occidente.
La reflexión está motivada por una situación que vemos en el ambiente. La gente muchas veces se siente inmersa en una cortina de humo y confusión. Se desconfía de la información de los medios de comunicación y del aparato oficial. Existe la duda y hay que percibir la realidad entre líneas.
Se ha mentido al pueblo. En la captura de El Chapo se informó oficialmente que fueron sólo los agentes mexicanos, sin ayuda de los agentes de Estados Unidos. Presionados por informaciones venidas del Norte, tuvieron que rendirse a la evidencia: hubo la cooperación de los vecinos del Norte.
Cuando fue abatido Nazario, Chayo, jefe templario, declararon: ahora sí fuimos nosotros solos, sin ayuda de los estadunidenses. ¿No que habían sido solos los agentes mexicanos.
Es más, ni así dicen la verdad completa. En el avance contra los templarios no han ido solos, han ido con los auto defensas. Ellos han dado información y han ido por delante. Los progresos que se han hecho para pacificar Tierra Caliente no se hubieran dado sin los auto defensas.
No se entiende la omisión de las autoridades: agradecen a Peña y a las fuerzas federales por haber abatido a Chayo y para nada se menciona a los auto defensas, éstos ya protestaron en su cuenta de twitter.
El presidente de México declaró en Ecuador que la muerte de Chayo se debió a la coordinación de las distintas instancias de su gobierno. Tampoco mencionó a los verdaderos artífices de la hazaña, Omitió a los auto defensas, lo que es una injusticia evidente.
Factor de la nube de humo son los datos que ocultan cuando no les conviene. El INEGI ha publicado muchos sobre retrocesos en economía, producción, confianza de los organismos internacionales, los sabemos por fuentes no gubernamentales o por declaraciones venidas de otros países.
Hay logros. Los actores sociales los gritan hasta la saciedad. Tienen el apoyo de algunos comunicadores que se constituyen en aduladores del gobierno, sin sentido objetivo ni crítico.
Se presenta una realidad parcial, no íntegra. El resultado es que la percepción de las cosas se dificulta, las declaraciones tienen un impacto deformante.
Las personas con un mínimo de sentido crítico tienen la sensación de que los actores sociales protegen su imagen, buscan el aplauso, tienen necesidad de que les hagan creer que son la última maravilla.
Una situación así es sumamente comprometida, riesgosa, avanzamos sólo en el discurso y la ficción.
Para avanzar con claridad y seguridad, se necesitan hombres maduros, capaces de construir un país seguro, firme. Para eso se necesitan sabios que iluminen a los actores del pragmatismo, la coyuntura. Que tengan bien claro el concepto del hombre, el concepto de la obra humana.
Se puede deducir el concepto de hombre que deben tener en su cabecita los dirigentes que parecen sentirse de una raza a parte, por encima del populo barbaro que mencionaban los romanos.
Parece estar en ellos ausente el concepto del ser humano, mortal, limitado, precario. Parecen no sentirse de la misma naturaleza de quienes estuvieron antes de ellos. Se sienten súper robots o mesías o demonios.
El concepto de la obra humana resulta falseado con ese presupuesto. Con tales sujetos, las obras salen siempre perfectas, nunca antes vistas, las obras esperadas, por fin México tiene lo que se merece, por primera vez en la historia están moviendo a México. Olvidan que ya se movió en 1985.
Evidentemente nos encontramos en el mundo de las ideas o de las fantasías, estamos en el mundo de la ficción, en la política ficción.
Todo está de lo mejor en el mejor de los mundos. Cito al filósofo Leibnitz, la frase es retomada por Víctor Hugo en Candide. Vamos muy bien, eso vale tal vez para la clase privilegiada, no para los pobres. Esa realidad existe únicamente en el universo de su retórica, de los discursos.
Como en el mito bíblico la estatua de oro plata y bronce enseña el cobre. Aparecerá la fragilidad de sus pies de barro.
Los demiurgos necesitan poner los pies en la tierra si quieren que México avance seguramente en la verdad y la humildad. Han perdido pie, vuelan como los papalotes muy altos pero sin hilo.
Hay que reformar la clase política mexicana, necesitamos hombres sabios, maduros, con los pies en la tierra.