Depende de la gobernanza de cada país que cultura impacte en cambios

URUAPAN, Mich., 18 de agosto de 2017.- Para que puedan verse cambios motivados por la cultura y las artes en sociedades violentas, dependerá de la política de cada país y de cada ciudad, explicó Lucina Jiménez Gómez, directora de la asociación ConArte, quien imparte un curso taller en Uruapan sobre Herramientas para la Convivencia en la Diversidad y Cultura de Paz.

Ejemplificó con el caso de Medellín, Colombia, donde la sociedad civil se hizo gobierno, “lo que ocurrió es que decidieron invertir más del 40 por ciento del presupuesto de la ciudad en cultura y deporte”, aseveró.

Dijo que se hizo el reconocimiento de los grupos de la sociedad civil, se otorgaron salas a los jóvenes y se generó todo un ambiente formativo, además la Universidad de Antioquía reformuló sus planes y programas de estudio. Calificó el caso de Medellín como emblemático.

La académica señaló que en el caso de Bogotá, también en el Sureño país de Colombia, hay actualmente una inversión muy importante de más de 50 millones de dólares, para usarse en infraestructura de espacios y programas culturales y artísticos en todas las zonas periféricas de esa ciudad, donde se atienden a más de 30 mil niños que ahora están ejerciendo sus derechos culturales.

Manifestó que al mismo tiempo en esa ciudad hay una revisión constante de los programas que se ejecutan.

La tallerista explicó que el tema básicamente recae en la gobernanza. En este sentido, hablo de Honduras: “Aunque la sociedad civil ha trabajado mucho, han habido muchos golpes de estado, entonces es muy difícil mantener la institucionalidad y el vínculo institucionalidad-sociedad civil, entonces se trabaja más desde la sociedad civil, aunque la Universidad Autónoma de Honduras ha hecho mucho trabajo comunitario”.

Dijo que en el caso de Ciudad Juárez, Chihuahua, empezaron a trabajar en el 2008 con las escuelas, y en el 2010 a nivel comunitario, lo que permitió que en un plazo de tres años y medio aproximadamente, se pudiera restablecer la vida pública.

Explicó que en la actualidad se sigue trabajando, porque una sociedad de posguerra necesita trabajar toda esta parte afectiva a nivel local.