CIUDAD DE MÉXICO, 21 de junio de 2016.- Ir al cine en México cuesta alrededor de 60 pesos en una sala tradicional, lo que lo coloca como uno de los países con el boleto con el precio más bajo en el mundo; sin embargo, las exhibidoras no están exentas de la falsificación y reventa de los mismos, además de la piratería y las descargas ilegales con las que se pierden más de 2 mil millones de pesos anuales.

De acuerdo con Canacine, en los últimos años la costumbre de ver películas en la pantalla grande ha incrementado y posicionado a México en el primer lugar de boletos más vendidos a nivel Latinoamérica. A escala mundial se encuentra en el cuarto; señala así Milenio.

“Somos el primer lugar en Latinoamérica. México es el cuarto país con más boletos vendidos a escala mundial. Solo está arriba India, China y EU que son países con mayor población. China cuenta con más de mil 200 millones de habitantes, India mil millones y EU 350 millones de habitantes”, comentó en entrevista José Leonardo Martí, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica y del Videograma (Canacine).

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