MORELIA, Mich., 2 de febrero de 2018. -En Michoacán en los últimos dos años 378 ciudadanos han sido víctima y denunciado algún tipo de delito cibernético, siendo el 2016 el de mayor incidencia.

Considerado por el Instituto Nacional de Geografía, Estadística e Informática (INEGI), como violencia social online, en el 2016 presentaron 240 denuncias ante la Policía Cibernética de la Procuraduría General de Justicia de Michoacán (PGJE).

Durante el año arriba referido el fraude cibernético fue el que más número de denuncias reunió, 76 fueron los casos documentados. Seguido por amenazas y acoso, dieron a conocer contactos oficiales.
Esta variante de violencia social en el 2017 se logró una notoria reducción, esto al pasar de 240 a 138 el número de víctimas. Sin embargo, el fraude cibernético volvió a despuntar con 51 carpetas abiertas ante el Ministerio Público Local.
En menor número de casos se documentaron ataques a la intimidad, ataque al honor y a la propia imagen, así colo bullying.
Entorno a esta problemática social generada en las redes sociales La Secretaría de Gobernación informó a traves de su página oficial que en México, en la encuesta 2005 del INEGI, revelaba que un 35.82%  de menores de educación básica habían sido víctimas de violencia social online.
En un mundo globalizado, donde las fronteras han sido superadas por el internet, el acoso, hostigamiento, fraude y ataques pueden porvenir desde cualquier aparato con acceso al internet, y pueden ser cometidos por uno o varios individuos, informa el comunicado.
Las autoridades han logrado identificar el comportamiento de aquellos individuos que atentan contra la integridad de quienes hacen uso de las redes sociales.
El acoso cibernético lo dividen en oho variantes: insultos electrónicos, hostigamiento, denigración, suplantación, sonsacamiento, exclusión, ciberpersecución y grabaciones con fines de difusión para posteriormente publicarlo.
En Michoacán este tipo de delitos esta considerado como un foco rojo, así lo declaró en enero del año pasado Isaerl Patrón Reyes, Unidad de Servicios de Inteligencia de la PGJE.
Para contrarrestar este fenómeno la procuraduría local implementa de manera permanente patrullajes virtuales con la Policía Cibernética por distintos sitios en la Internet y comunidades virtuales, especialmente en estas últimas, ya que es donde se ha detectado de manera recurrentes actividades con tintes alarmantes de violencia social, con probabilidad de materializarse en un delito.
Tal es el caso de robo de identidad, trabajos vinculados a la prostitución, amenazas, ataques a la imagen y el honor e invitación a riñas colectivas, tal y como pasó también durante el 2017 en Uruapan.
Los terrenos aledaños al aeropuerto de la Perla del Cupatitzio fue propuesto por preparatorianos para ser el escenario de una zurra colectiva, segun se informó a traves de la red social Facebook. Sin embargo, las autoridades de la Policía Michoacán se mantuvieron alertas en la zona y tal pelea no aconteció.
También a través de esta red social a principios del 2017 los inconformes por el incremento a la gasolina convocaron, en por lo menos una ocasión, a saquear plazas comerciales. Hechos que tampoco se consumaron.
Al respecto las autoridades locales han hecho el llamado a los padres de familia a vigilar el contenido que visitan sus hijos menores en internet; asimismo, a loa jóvenes a no compartir datos personales como dirección, teléfono, cuentas bancarias y contraseñas de sus redes sociales.