MORELIA, Mich., 27 de septiembre de 2020.- Entre 150 mil y 200 mil pesos deberán destinar negocios en el primer cuadro de Morelia para llevar a cabo el retiro de pintas, grafitis y pegatinas colocados en sus locales durante la marcha realizada el viernes, 26 de septiembre, para demandar justicia para Jessica González Villaseñor, aseveró Alfonso Guerrero Guadarrama, presidente de la Asociación de Comerciantes y Vecinos del Centro Histórico (Covechi).

Explicó que el lavado de las pinturas utilizadas en las expresiones instaladas durante la marcha representa un “daño económico muy fuerte” para los comercios afectados, ya que “aparte de la intimidación, tenemos que reponer y reparar los desperfectos”.

Sin embargo, consideró que, más allá de las pintas, grafittis y pegatinas, estas acciones tienen consecuencias irreversibles y de largo alcance, como el deterioro del patrimonio edificado y de la imagen de Morelia como destino turístico y de inversión.

“Buscamos impulsar la imagen de Morelia y con hechos como los de ayer sábado) vuelve a quedar en un pendiente, fuera del ojo de visitantes, turistas y posibles inversionistas, estas marchas tienen consecuencias a largo plazo que no siempre se vislumbran”, reiteró Alfonso Guerrero.

El presidente de la Covechi mencionó que “el objetivo de la marcha es razonable, creo que todos somos empáticos con la causa, no hay que olvidar que hay niños, hombres, ancianos, jóvenes agredidos, nadie se ha escapado de la ola delictiva y de la pérdida de valores, pero en este caso los medios son deplorables,  no generalizo, porque no todas las mujeres se comportaron así, una vergüenza para la sociedad, pero hay algunos grupos que no son totalmente libres, están manipulados o influenciados con recursos económicos por algún grupo que busca desestabilizar al gobierno y a la sociedad”.

Debido a que los negocios previeron la posibilidad de actos de vandalismo durante la marcha, aseguró Guerrero Guadarrama, hasta el 90 por ciento de los establecimientos localizados en las inmediaciones de su ruta permaneció cerrado para buscar mitigar daños a sus locales.

Al momento, no se tiene una proyección de las pérdidas que por este cierre tuvieron los negocios en la zona, aunque insistió en que los más graves refieren a la falta de tranquilidad.