CIUDAD DE MÉXICO, 11 de marzo de 2018.- La alimentación y el ejercicio físico se suelen considerar la base de una salud de hierro. Pero, ¿qué hay del cerebro? El centro de operaciones del cuerpo necesita tanto o más mantenimiento que los músculos, especialmente en edades avanzadas y para cuidarlo como merece ha nacido el fitness mental.
Comenta 24 Horas que cada sesión de fitness mental comienza con un buen calentamiento, preferiblemente aeróbico. A continuación, se empieza a trabajar con fichas cognitivas como las que se emplean en el tratamiento de enfermedades como el Alzheimer, orientadas a ejercitar la memoria, el lenguaje, la concentración, la creatividad y un largo etcétera.
Después se practica “una disciplina de corrección postural donde se trabaje la musculatura de manera equilibrada”, como puede ser pilates, yoga, taichi o ballet clásico, entre otras. Una nueva fase de estimulación cognitiva, una sesión de fuerza y, finalmente, una última estimulación con juegos, rompecabezas, puzzles o cualquier otro ejercicio original, para acabar la clase con la mente contenta.