Mantienen Estado y Federación operativo en Apatzingán
Julia Romero, llegó junto con su nieta a solicitar información porque le dijeron que su cuñada Eufrosina Guzmán Mejía se encontraba hospitalizada.
Señala Excélsior en su portal que fue informada por el policía de guardia de la puerta que había muerto unas horas antes.
“Acaba de morir… ¿murió en la mañana? me dice el policía que sí, nosotros no sabíamos nada”.
Recuerda que su cuñada desde hace más de 50 años se dedicaba a la venta de juegos pirotécnicos en el mercado de San Pablito, “era un negocio de la familia”.
Aunque llora porque perdió a su cuñada, da gracias a Dios pues el día de la explosión también se encontraba en el mercado su hijo, quien logró ponerse a salvo.