MORELIA, Mich., 24 de noviembre de 2016.- Estas noches de cañas y mercado nocturno también son noches morelianas, no tienen nada que ver con la del 30 de septiembre, pero sí son ya tradicionales, previas al 12 de diciembre.

A lo largo de la Calzada Fray Antonio de San Miguel, que en estas fechas se convierte en la Calzada Guadalupe, las personas vienen y van en grupos de amigos, familias y parejas. Algunas con cañas, otras con algunos antojitos que se pueden conseguir en los puestos que circundan la zona.

Una rondalla conformada por hombres, al parecer de la tercera edad, tocan las guitarras e interpretan boleros y canciones rancheras; están acompañados por una multitud que les aplaude y les escucha con atención.

Conforme el camino se acerca a la plaza jardín Morelos, se hacen notar decenas de puestos iluminados con focos Incandescentes, que fueron colocados sobre el paso vehicular de la Calzada.

Llama la atención la variedad de cosas que se comercializan en los puestos: hay gorditas de trigo, obleas, calcetines, dulces, tacos, gorras, playeras, accesorios para celulares, lentes y obviamente cañas, muchas cañas que la gente va mascando.

En el terreno donde antiguamente estaba situado el Hospital Guadalupano, hoy se encuentra invadido por juegos mecánicos y música a todo volumen.

También hay una sección que abre desde temprano y es muy concurrida por los jóvenes estudiantes: los futbolitos.

En la fachada del Templo de San Diego luce iluminada y colorida la imagen de la Virgen de Guadalupe. Todo parece listo para que el próximo 12 de diciembre, cientos de peregrinos, quizá miles, tomen la calzada y se dirijan a la Basílica de Guadalupe, para cumplir una manda o simplemente para pedir un milagro.