COYUCA DE CATALÁN, Gro., 24 de junio de 2016.- En el lecho de muerte,  de Luis Sergio Vielma Astudillo ondearon dos banderas, la de México y Estados Unidos; países donde nació y convivió el joven victimado en Orlando, Estados Unidos. Con playeras blancas donde se portaban la imagen de Luis Sergio, familiares y amigos dieron el último adiós a este joven, entre aplausos y lágrimas.

La tarde de este viernes, justo 12 días después de la masacre ocurrida en el interior del bar Pulse, de Orlando, Florida; el cuerpo de Vielma Astudillo fue sepultado en el panteón municipal de Coyuca de Catalán, Guerrero, donde son originarios sus padres. “No te preocupes mi negro, nunca te abandonaremos.

“Yo vendré  a visitarte, no estarás sólo”, fueron algunas de las palabras de Luis Vielma, padre de la víctima. Antes de que llegara el cuerpo, familiares y amigos de la familia Vielma Astudillo ya llevaban 10 días de rezo en la casa paternal del joven, a quien siempre lo identificaron como allegado a la Iglesia católica.

De 22 años de edad, y cuya nacionalidad era de Estados Unidos de Norteamérica, su familia decidió venir a sepultarlo a Coyuca de Catalán, porque en vida visitaba este municipio constantemente, el cual se ubica en la región Tierra Caliente del estado y se le recuerda en esta tierra cuando vacacionaba y por su afición a la comida calentana.

Identificado por su familia como “un joven líder y entusiasta”, Luis Sergio Vielma era el mayor de tres hermanos con 22 años de edad, seguido por Bryan y Kimberly, de 17 y 15 años, respectivamente. Justo a sus 22 años, Luis Sergio había conseguido su primer trabajo en Estados Unidos, en el Universal Studios, mundo mágico de Harry Potter, por ser seguidor de la saga del joven mago inglés, e incluso la escritora J.K. Rowling, le dedicó un texto al joven guerrerense para honrarlo y condenar su muerte.

Con información de Quadratín Guerrero