| MORELIA, Mich., 2 de junio de 2018.– En Michoacán, se extiende una caudalosa franja de más de 400 manantiales que atrae a turistas y visitantes por las condiciones climáticas favorables conocida como “la ruta de la salud”.
Señala un comunicado de prensa que, los manantiales termo-minerales del estado se ubican en espacios ecológicos que dan vida a magníficos balnearios y parques acuáticos enmarcados entre bosques y montañas, donde el turista y visitante encontrará reposo y entretenimiento con el fluir de las aguas cristalinas, además de encontrar excelentes servicios.
Los balnearios y parques acuáticos en Michoacán se concentran es el Centro del estado, en las comunidades de Huandacareo, Araró, Zinapécuaro, Cointzio, Puruándiro, Indaparapeo, Queréndaro y Tenencia Morelos. Casi todos cuentan con manantiales de aguas termales.
Entre los de mayor popularidad se encuentran los de Araró y Huandacareo, así como los de Zinapécuaro, ubicados a solo unos minutos la capital del estado; en la zona de Uruapan cuenta con un número menor de estos centros de recreo, cabe destacar que posee uno de singular belleza: la Ex Hacienda Caracha.
Entre los parques y balnearios que integran la ruta de la salud destacan: Agua Blanca, pertenece al municipio de Jungapeo, a tres horas de la ciudad de México, por la carretera nacional no. 15 México-Guadalajara. Es un balneario de aguas sulfurosas y termales de 30ºC y cuenta con un sencillo hotel rodeado de cascadas y paisajes.
Los Azufres, situado en medio de bosques, lagunas, cabañas, áreas para campamentos y bellos paisajes existe una serie de balnearios de aguas termales azufradas, en un territorio de 5 kilómetros a la redonda. Se llega a este lugar por la carretera no. 15 México-Guadalajara, llegando por la desviación que sale a 5 kilómetros de Ciudad Hidalgo.
Caracha, ubicada en un valle a 18 kilómetros de Uruapan, es una hermosa hacienda que tiene en pie más de 150 años, cuenta con las más modernas instalaciones, rodeada de áreas verdes pero respetando la escénica del lugar. Todo el año cuenta con un agradable clima templado y se encuentra a 1,200 metros sobre el nivel del mar. Sus cristalinas aguas nacen en un manantial cercano llamado “el Hortigal”.
Tepetongo, a unos 8 kilómetros de los límites entre Michoacán y el estado de México, sobre la carretera Atlacomulco-Maravatío, se encuentra la desviación de camino asfaltado que conduce después de 10 km. Al municipio de Contepec. El balneario cuenta con albercas de aguas termales, algunas equipadas con toboganes y a su alrededor hay campos de juegos y una enorme huerta con árboles frutales propios de la región, como duraznos, perales, ciruelos y manzanos.
Reino de Atzimba, se localiza en Zinapécuaro, a 40 minutos de Morelia. Posee dos albercas privadas y tres más de gran tamaño. Una de olas y otra de corriente lenta con toboganes, además de hotel y área de campamento.
Cointzio, se encuentra a 8.4 km. al sureste de Morelia por la carretera que va a Pátzcuaro, cuenta con aguas termales y servicio de restaurante y baños privados.
El Ejido y El Edén, se ubican en la Tenencia de Morelos, a unos cuantos minutos de Morelia por la misma carretera que va a Cointzio. En la tenencia se encuentran los manantiales que nutren estos sitios de aguas mesotermales aplicables por sus propiedades químicas en el tratamiento de gastritis, enteritis, colitis y afecciones de la piel. La cercanía con Morelia facilita el alojamiento para todos los gustos y presupuestos.
Ixtlán de Los Hervores, se llega por la carretera No. 15 que va de Morelia hacia Ocotlán, hasta el municipio de Ixtlán. En el lugar hay varios manantiales de aguas termales y un atractivo adicional y muy visitado es el géiser que alcanza grandes alturas, conocido como Ixtlán de los hervores. Las aguas de estos manantiales tienen un contenido de bicarbonato de calcio y magnesio, así como cloruro de sodio y potasio. Este sitio cuenta con vestidores, sanitarios y juegos infantiles.
En el estado existen balnearios llenos de magia: la Gallina en municipio de Gabriel Zamora; el Pedregal, en Antúnez; la Nopalera y el Beba en Apatzingán; la Puesta del Sol en la Ruana (Felipe Carrillo Puerto); Vista Bella, en Buena Vista Tomatlán, así como en Uruapan, el Paraíso; La Pasión en San José de Gracia, en el municipio de Marcos Castellanos. |
