Avanzan trabajos para rescatar el Lago de Pátzcuaro
CIUDAD DE MÉXICO, 25 de marzo de 2018.- Investigadores desarrollaron un sensor que se coloca en el diente y monitoriza los fluidos ingeridos para después transmitir la información de forma inalámbrica, con el objetivo de obtener niveles de glucosa, sal o alcohol.
Explica 24 Horas que, el dispositivo, de dos por dos milímetros (mm), vigilará en tiempo real lo que ocurre dentro y alrededor del cuerpo, con fines médicos para hacer estudios clínicos de seguimiento.
De acuerdo con un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Tufts, en Estados Unidos, el sensor se pega a un diente y se comunica de forma inalámbrica con un dispositivo móvil, lo que permite transmitir de forma inmediata información sobre lo que consume la persona que lo lleva.
La investigación, publicada en la revista “Advanced Materials”, muestra cómo futuras adaptaciones de estos sensores podrían permitir la detección y el registro de una amplia gama de nutrientes, sustancias químicas y estados fisiológicos.