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MORELIA, Mich., 1 de enero de 2014.- En la intención de resolver problemas relacionados con la generación de energía a través de procesos amigables con el medio ambiente, la ivestigadora Karina Suárez Alcántara de la Universidad Nacional Autónoma de México, campus Morelia, realiza estudios en el área de las ciencias materiales, con el objetivo de generar dispositivos altamente eficaces y seguros para el almacenamiento de hidrógeno.
Al respecto la investigadora, explicó que el hidrógeno puede ser usado como combustible limpio, pero al no enocontrarse libre en el ambiente es necesario producirlo, obteniéndolo del agua.
Para ello, dijo, es necesario utilizar energía eléctrica, misma que se puede obtener de una manera amigable al ambiente a través de las “energías renovables” como son la eólica o solar.
Todas las energías renovables son estacionales. Por ejemplo, explicó que “en un panel solar se puede captar energía durante el día, pero en la noche ya no, por lo se requiere almacenar dicha energía. El hidrógeno es una forma de almacenar energía. Sin embargo, para almacenar el hidrógeno y utilizarlo como un tipo de energía renovable no es tan sencillo”.
Añadió que “un litro de agua contiene 111 gramos de hidrógeno y el resto es oxígeno. 111 gramos de hidrógeno gaseoso ocupa aproximadamente el mismo volumen que un tinaco de agua a temperatura ambiente y presión atmosférica. Comercialmente, lo comprimen y lo venden en cilindros similares al del helio, lo que resulta impráctico porque se necesita mucha energía para comprimirlo y los cilindros son de materiales gruesos y muy pesados. Se podría enfriar más hasta hacerlo líquido pero ese proceso requiere de mucha energía.
La mayoría de las investigaciones dirigidas a la acumulación de hidrógeno se enfocan en almacenarlo de manera compacta y ligera para vehículos de hidrógeno, de ahí la importancia de diseñar prototipos de materiales ligeros, baratos, seguros, y que pueda liberar el hidrógeno a presiones y temperaturas bajas. En la actualidad, las grandes compañías automotrices tienen proyectos de investigación en esta línea, señalo.
Mencionó que en el tema de almacenamiento de hidrógeno todavía no hay un material que reúna los requisitos para acumularlo y distribuirlo y su estudio sistemático tiene apenas unos 40 años.
Actualmente, en el almacenamiento de hidrógeno existen dos líneas de investigación en esta área. El primero de ellos es el diseño de materiales que cumpla con todas las necesidades, es decir la investigación básica. La segunda línea es el desarrollo de prototipos de los tanques que contienen a los materiales almacenadores de hidrógeno, esto es la investigación aplicada
Cabe decir que la investigadora está desarrollando estos temas desde 2008, primero en el Instituto Politécnico Nacional, y posteriormente en instituciones en Alemania y Suecia en las que trabajó en nuevas técnicas de caracterización de materiales, lo que representa un gran reto para la ciencia en materiales, ya que este tipo de estudios requieren de grandes inversiones.
“Llevar a la práctica estas investigaciones resulta costoso, porque al trabajar con hidrógeno se necesitan determinados requerimientos y medidas de seguridad que lo hacen muy caro. Pero a largo plazo resulta más caro no invertir en investigación. Hasta ahora el avance más importante de la investigación en este tema lo ha desarrollado el grupo alemán quienes ya diseñaron un tanque con capacidad de ocho kilos del material almacenador”, refirió.