Mantienen Estado y Federación operativo en Apatzingán
MORELIA, Mich., 16 de septiembre.- Los fenómenos meteorológicos que está enfrentando el país son históricos y no tienen precedente en la historia, señaló el titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.
Se trata de una situación anómala provocada “por dos fenómenos hidrometeorológicos simultáneos, uno en el Pacífico y otro más en el Océano Atlántico, que hasta este momento han afectado a más de dos terceras partes del territorio nacional” destacó el funcionario.
La intensidad de los efectos de ambos fenómenos sobre el territorio nacional ha sido diversa, pues las lluvias van desde ligeras hasta extremadamente abundantes, y únicamente tres estados de la república no han sido afectados, destacó el funcionario.
En la parte del Pacífico, señaló el funcionario, “tendremos una gran cantidad de lluvias los próximos días por el ingreso de humedad y no descartamos que esta humedad se corra de punta a punta desde el estado de Chiapas hasta Baja California Sur”.
En el tema del Atlántico, también tenemos una gran cantidad de nubosidad que está ingresando por el estado de Tamaulipas y seguirá por los estados de San Luis e Hidalgo y llegará a la parte centro del país, lo cual estamos monitoreando, señaló David Korenfeld, director general de la Comisión Nacional del Agua.
Adicionalmente, destacó el funcionario, hay un frente norte en los Estados Unidos que no ha permitido el desplazamiento de la humedad y por la región sur del país hay lluvias importantes en Belice, Guatemala y la región de Centroamérica.
La situación es delicada y es muy importante comentar que no hay antecedentes de la situación climática que prevalece, y “quiero establecer que hasta que no se mueva la humedad del Pacífico vamos a seguir teniendo una cantidad de lluvias importantes, principalmente en los estados de Oaxaca, Guerrero, Michoacán y Colima”, anticipó el funcionario.
La presencia de abundantes lluvias por un tiempo prolongado y el estancamiento de la humedad está generando desplazamientos en las montañas, y ahora “el gran enemigo de las próximas horas es la saturación del suelo, quiere decir como el suelo tiene saturación requiere un deslizamiento mucho más rápido de las aguas”, advirtió el director de la Comisión Nacional del Agua.
Por ello, el gobierno federal ha comenzado a tomar providencias y desde que empezó este fenómeno, maneja el Comité de Operación Técnica que determina cómo operar la infraestructura del país.
Por lo pronto, señalaron los funcionarios de Conagua y Gobernación, en la Cuenca del Balsas, donde tenemos la mayor cantidad de lluvia, tenemos las presas El Villita, Caracol e Infiernillo. A Infiernillo le están entrando 36 mil metros cúbicos por segundo y está sacando mil 44.
Esto quiere decir que con estas presas operadas por CFE tienen que tener una política de operación, cuánta agua puede mandar aguas abajo y también qué capacidad requerimos de almacenamiento de las mismas para poder prever las lluvias de las próximas horas.