MORELIA, Mich., 8 de abril de 2014.-La pobreza es el desafío más grande que enfrentan las democracias representativas, así como encontrar la forma de nivelar las condiciones económicas y sociales de la población, aseguró la doctora Paulette Dieterlen quien ofreció la conferencia magistral “La pobreza, una cuenta pendiente de la democracia”, en el XVII Congreso Internacional de Filosofía, “Filosofar en México en el siglo XXI, Adversidad y novedad de la época”, que se realiza por vez primera en el Centro de Convenciones, organizada por la Universidad Michoacana y la Asociación Filosófica de México.

De acuerdo con un comunicado de prensa, luego de aludir al recientemente finado filósofo mexicano Luis Villoro, quien creía que salir del modelo Estado-nación es necesario para acceder a una verdadera democracia participativa, Dieterlen señaló ante los medios de comunicación que aún puede nivelarse la desigualdad social y económica en el seno de las democracias representativas, en las que el Poder Judicial debe garantizar la libertad, misma que se basa en tres puntos: equilibrio de oportunidades para conseguir algo, autonomía para decidir lo que se quiere e inmunidad frente a las instituciones.

“En primer lugar es necesario nivelar el campo de juego para, en segundo, acceder a posiciones más ventajosas, ser elegibles y tener las mismas oportunidades dentro de la sociedad; algo de lo que el Estado debe ocuparse para nivelar la vida de quien nace con menos dotes y en circunstancias desfavorables. Sin eso, la verdadera democracia no existe”.

Paulette Dieterlen manifestó que los pobres son un sector de sufragantes manipulables, a quienes con la promesa de un programa social (que a veces no llega o cuya obtención es problemática) se los induce a votar por un candidato, lo que debe cambiar. “No sé si es muy ilusa mi propuesta, pero no es sólo votar, necesitamos educación, una democracia ilustrada que conozca sus derechos, garantías y las obligaciones del Estado”.

Con datos del Banco Mundial, que hablan de un 46 por ciento de la población en el mundo con percepción de menos de dos dólares diarios, y mil 200 millones de personas con menos de un dólar por día, la doctora en filosofía subrayó que la pobreza es una tragedia y una vergüenza de las sociedades democráticas, mayormente liberales, un problema multidimensional que no puede medirse sólo por el poder de compra de la gente, tal como los organismos financieros hacen en la mayoría de países, ya que los estragos que causa la marginación social se reflejan en la educación y en el nivel de vida.

Refirió que una política de igualdad de oportunidades aún es posible, y repitió que los gobiernos deben compensar a aquellas personas que nacen con desventajas frente a otros miembros de la sociedad, a fin de que la salud, la educación, el empleo, la utilidad y la elegibilidad de todos los ciudadanos sea una realidad.

Finalmente, se preguntó cómo sería posible establecer una democracia directa, para no caer en casos donde la población toma en sus manos la impartición de justicia, lo que hablaría de un Estado fallido, como en el caso de Michoacán.

 

Ficha curricular

Paulette Dieterlen: Obtuvo la Licenciatura en Filosofía por la Universidad Iberoamericana, la Maestría y el Doctorado en la misma disciplina por la UNAM y realizó estudios de maestría en el University College de la Universidad de Londres. Es miembro del Sistema Nacional de Investigadores desde 1990, tiene el nivel III.

Es investigadora del Instituto de Investigaciones Filosóficas, del cual fue Directora de 2000 a 2004. También es profesora de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Desde 1972 ha dado clases en diversas instituciones educativas del país y desde 1983 imparte clases en la Facultad de Filosofía y Letras, UNAM, tanto en Licenciatura como en Posgrado.

Tiene artículos en revistas nacionales e internacionales y 4 libros: como autora única Sobre los derechos humanos, (Instituto de Investigaciones Filosóficas/UNAM, 1984), Marxismo analítico. Explicaciones funcionales e intenciones, (Facultad de Filosofía y Letras/Dirección General de Estudios de Posgrado/UNAM, 1995), Ensayos sobre justicia distributiva, (Fontamara, 2001) y La pobreza: un estudio filosófico (Fondo de Cultura Económica/Instituto de Investigaciones Filosóficas/UNAM, 2003). Es editora del libro De la justicia global a la local. Y compiladora del libroRacionalidad y Ciencias Sociales (Instituto de Investigaciones Filosóficas/UNAM 2003). Ha colaborado en la Enciclopedia Iberoamericana de Filosofía. Coordinó la traducción del Diccionario de Ética y Filosofía Moral para el Fondo de Cultura Económica. Miembro del Consejo Consultivo en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos desde 2002.

Los proyectos en los que ha participado son los siguientes: (1) Problemas de ética práctica, que tenía como objetivo estudiar los problemas que en ésta se presentan, tomando en cuenta su impacto en distintos sectores como la medicina local y global, la economía y la ecología. (2) Temas de la justicia distributiva, el objetivo del proyecto es abordar los temas de los que dicha justicia trata.

La doctora pertenece a la Asociación Filosófica de México, es miembro de la Academia Mexicana de Ciencias y es miembro del Sistema Nacional de Investigadores desde 1990, tiene el nivel III.