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ZITÁCUARO, Mich., 13 de abril de 2016.- Para elaborar su Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria (DNSP) 2015, la Comisión Nacional de Derechos Humanos revisó 130 penales estatales en el país, 21 centros federales de máxima seguridad y tres prisiones militares.
En el caso de Michoacán, se incluyeron los casos del Centro de Readaptación Social “General Francisco J. Mujica”, el Centro de Reinserción Social “Lic. David Franco Rodríguez”, el Centro de Reinserción Social “Lic. Eduardo Ruiz”, en Uruapan, y el Centro de Reinserción Social “Hermanos López Rayón”, en Zitácuaro.
Luego de varias visitas para revisar aspectos que garantizan la integridad física y moral del interno; aspectos que garantizan una estancia digna; condiciones de gobernabilidad; reinserción social del interno, y grupos de internos con requerimientos específicos los tres primeros Ceresos obtuvieron calificaciones reprobatorias (5.72, 5.98 y 5.64, respectivamente), en tanto que el cuarto saco foco amarillo con 7.52.
Cabe mencionar que la tendencia en tres de los cuatro penales es hacia un deterioro, en tanto que en uno (el Hermanos López Rayón) se proyecta estable.
En el Cereso de Zitácuaro, que aloja a personas que cometieron alguna violación a las leyes, la capacidad es de 491 internos, pero al día de hoy tiene una población de 266, once de ellas mujeres.
Dentro de un programa para activar medidas de reinserción se realizará el viernes próximo en la Plaza Cívica de esta cabecera municipal una exhibición de artesanías y otro tipo de productos que se elaboran en los Ceresos de Michoacán, a fin de que los reclusos obtengan recursos para sostener a sus familias.
Se prevé la asistencia del gobernador Silvano Aureoles Conejo, así como de diputados locales y federales y autoridades municipales.
La exposición fue organizada por el director del Cereso Hermanos López Rayón, Rafael Salazar Esquivel y tiene como promotores a algunos empresarios del oriente de Michoacán, entre ellos Roberto Molina Loza y Cenobio Contreras Esquivel.
En 2011 los estados gastaron ocho mil 658 millones de pesos en sus centros penitenciarios: cada interno del fuero común costó, en promedio, 50 mil pesos; lo anterior equivale a 134.42 pesos gastados cada día, por cada interno.
En 2013 el gasto estatal aumentó a nueve mil 880 millones 520 mil pesos: equivalente a 52 mil 957 pesos por interno al año, o 145.08 pesos diarios por cada interno.
En 2015 la administración de los penales federales costó 17 mil millones de pesos; aproximadamente 750 mil pesos por interno.