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MORELIA, Mich., 12 de marzo de 2016.- Aunque se les manda mensualmente a los comedores comunitarios lo equivalente para dar de desayunar y comer a 120 personas en promedio, lo numérico no es tan importante, señaló en la tenencia de Chiquimitío, Víctor Manuel Tapia, delegado en Michoacán de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), en referencia al gasto que representa para esa dependencia y a la cantidad de personas beneficiadas.
El funcionario federal explicó que la inversión inicial es de 100 mil a 120 mil por comedor con un equipamiento básico, que consta de mesas, sillas, fogón, estufa y el primer surtimiento de despensas. Después cada mes se surte una despensa a cada comedor con un valor de 60 mil pesos, por lo que sacando cuentas de 240 platillos promedio, que alimentan a 120 personas, el gobierno federal entrega unos 2.5 a 3 pesos por ración servida, no hay dónde se pueda tener eso, indicó.
Víctor Manuel Tapia aseveró que con los 450 comedores que operan en el estado se benefician alrededor de 50 mil niños, mujeres y personas de la tercera edad, aunque no son mu fiables los números, ya que hay comedores que atienden a 160 y 180 personas, pero después sólo atienden a unas 70 u 80, por variables como si hay clases o no en la escuela con los niños, si las mujeres salen a recibir su pago de Prospera o simplemente las dinámicas de la comunidad.
Indicó que por la urgencia se inició con ciertos productos, como agua embotellada, huevo en polvo, pero que hoy tienen qué revisar si eso es lo que la gente necesita, eso las mujeres lo tienen qué decir.
Como parte del proyecto de huertos y granjas de traspatio, se pudo observar que en la Casa Ejidal, que las mujeres de la comunidad de Chiquimitío ocupan para poder realizar los alimentos y dar de comer, se encuentra una huerta con diferentes plantas comestibles. También una vecina del lugar mostró un gallinero con 57 aves, que producen 40 huevos diarios, lo cual permite a la comunidad alimentarse de mejor manera.