MORELIA, Mich., 19 de septiembre de 2015.- Al referirse a la urgencia de que se aplique la revocación de mandato, el padre Alejandro Solalinde indicó que aunque pueda considerarse una utopía, esta puede llevarse a cabo en 2018, donde incluso, consideró interesante que pudiera considerarse postular a la periodista Carmen Aristegui para ocupar un cargo, pues los ciudadanos ya están hartos de los políticos.
Recordó la trascendencia que tuvo la figura de las candidaturas independientes en estas elecciones pasadas, en las que un estado, Nuevo León, contará con Jaime Rodríguez Calderón, el primer gobernador no emanado de un partido político, al igual que un municipio, Morelia, en Michoacán, con Alfonso Martínez Alcázar, como edil que no representa a algún partido político.
Ante ello, indicó que es necesario que se dé la oportunidad a que México cuente con una mujer al frente de la Presidencia y qué mejor que lo haga una mujer a la que considera preparada y con el respaldo de millones de mexicanos.
“No nos queda de otra, platicaba con una mujer y le decía que hasta ahorita la sociedad que tenemos está diseñada por hombres, el sistema neoliberal capitalista igual, el sistema económica mundial igual, la Iglesia Católica igual; ha habido buenas candidatas pero no han logrado superar el machismo.
“Esta decadencia que vivimos ha sido por una sociedad diseñada por varones, por eso digo que una mujer como Carmen Aristegui pueda salir como candidata a la Presidencia, si la popularidad de algunas candidatas que no tienen la preparación ni la idoneidad para hacerlo, han salido elegidas tan solo porque son famosas, pues con mayor razón Carmen Aristegui que sí sabe, que sí puede y que tiene todo el cariño de la gente”.
Refirió que el próximo 4 de octubre acudirá al evento en el que Jaime Rodríguez ‘El Bronco’ asuma oficialmente el cargo como gobernador de Nuevo León, pues desde un principio le manifestó apoyo al inicio de su campaña porque “merecía el beneficio de la duda”.
“Le dije ‘yo voy si tú me aseguras que voy a seguir siendo para ti un refuerzo espiritual, una voz libre, pero también un contralor moral’, yo no voy a dudar tantito en decirle si tiene errores, se lo voy a decir”.