Librerías, negocio en proceso de extinción, INEGI

MORELIA, Mich., 29 de junio de 2015.- En México, poca gente para educarse, informarse o ampliar su cultura, pues cuatro de cada tres personas alfabetas recurren a la lectura por puro entretenimiento, destacan los resultados del Módulo de Lectura (Molec) que levantó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) durante los primeros 20 días de mayo de este año.

De acuerdo con el sondeo del INEGI, cuatro de cada cinco lectores potenciales abrevan de alguno de los siguientes materiales de lectura: libros, revistas, periódicos, historietas, páginas de internet, foros o blogs.

De acuerdo con el sondeo de mayo, “el tiempo promedio por sesión continua de lectura del total de la población es de apenas 39”, señala el instituto tras resaltar que la diferencia de género en las actividades de lectura es dos minutos superior en el caso de las féminas –que dedican un promedio de 40 minutos a la lectura-, sobre los hombres, que sólo leen en promedio 38 minutos.

Los tiempos de lectura de la población en general no son muy inferiores a los de las personas con algún grado de instrucción superior, que en pomedio dedican sólo 49 minutos a la lectura, sólo 21 minutos más que las personas sin educación básica, que destinan apenas 21 minutos de su día a la lectura de algún material.

El INEGI encontró también que el mayor acceso a materiales de lectura “lo registraron las personas que acudieron a la sección de libros y revistas de una tienda departamental (25.7%); en segundo lugar se encuentran las personas que fueron a una biblioteca (17.7%); y el menor porcentaje se registró en personas que fueron a alguna librería o a un puesto de libros o revistas usados (15.6% en ambos casos)”, lo que muestra a librerías y editoriales como negocios en verdadero peligro de extinción.

En cuanto a estímulos en el hogar para la lectura, poco menos de dos terceras partes de la población declaró tener libros diferentes a los de texto en casa; más de la mitad veía a sus padres leer; y a casi un tercio les leían sus padres o tutores: al 35.3 por ciento les leía el “padre”, al 63.1 por ciento la “madre” y aquella población a la cual le leía el “tutor” fue de 1.6 por ciento.

En lo que respecta a la motivación escolar, poco más de tres cuartas partes de los entrevistados contestaron que sí exponían en el salón de clase la lectura realizada (77.2%); más de la mitad era motivado por sus profesores para leer libros (60.8%); y el 50.2 por ciento, para asistir a bibliotecas.

Finalmente, el INEGI destaca que de la muestra seleccionada para aplicar el Molec en mayo pasado se detectó un 3.2 por ciento de analfabetas funcionales o personas que, pese a saber leer y escribir, no tienen la capacidad para escribir o entender un recado elemental.

El Molec se aplicó en 2 mil 336 viviendas ubicadas en las principales 32 ciudades de la república con más de 100 mil habitantes, a adultos mayores de 18 años, con un esquema probabilístico estratificado y por conglomerados.

El sondeo se realizó los primeros 20 días de mayo pasado y la cobertura geográfica  fue “a nivel nacional-urbano, derivado del agregado urbano de 32 ciudades de 100 mil y más habitantes”, concluye INEGI.