MORELIA, Mich., 4 de diciembre de 2015.- A fin de responder estas interrogantes e informar sobre métodos, estrategias y acciones para diseñar y ejecutar planes de desarrollo comunitario que permitan realizar proyectos productivos sustentables en materia agraria o forestal, según un comunicado, el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), llevó a cabo la teleconferencia Plan de desarrollo comunitario y proyectos productivos sustentables: planeación, ejecución y evaluación del impacto social, que integra el curso Conservación del medio ambiente y desarrollo sustentable.

“Un plan de desarrollo comunitario es un proceso diseñado de acuerdo a las necesidades de una comunidad en desarrollo y que, pese a no ser siempre de carácter económico, si se encuentran directamente relacionadas. Éstas derivan en un diagnóstico situacional gracias al que nacen nuevas necesidades y se generan alternativas específicas” mencionó Marcial Reyes Cázarez, docente de las ingenierías Ambiental y Desarrollo Comunitario del Instituto Tecnológico Superior de Pátzcuaro. Añadió un plan de desarrollo comunitario tiene el fin de generar mejores condiciones de vida para cada miembro de la comunidad.

Desde la Mixteca de Oaxaca, se realizó una video llamada con Mario López, técnico comunitario del Fondo para la Paz, IAP, quien comentó desde 2004 la institución incide en esa región y ha beneficiado a 1 mil 600 personas y formado a 148 promotoras comunitarias en 10 comunidades. El activista mencionó que antes de ejecutar un proyecto realizan una reunión con comités, promotores comunitarios y habitantes de las comunidades para integrarlos en el procesos. Además, en coinversión con el Indesol, se ejecutó un proyecto para mejorar las condiciones de seguridad alimentaria y nutrición en zonas de escasez de agua en las comunidades rurales indígenas de San Antonio Monteverde, Oaxaca.

Adriana González César, subdelegada de Planeación y Fomento Sectorial de la SEMARNAT, Delegación Puebla, habló del Programa Sectorial de Medio Ambiente y Recursos Naturales, que se enfoca en aprovechar el patrimonio cultural de manera sustentable, fomentar buenas prácticas productivas e impulsar el desarrollo local sustentables de los municipios más vulnerables al cambio climático a fin de mitigar sus efectos. Explicó que el enfoque ecosistémico es aquel en donde se da relevancia al individuo y su estrategia de vida. Además subrayó que para implementar estos programas de manera exitosa es necesaria una estrategia flexible y colaborativa.  

Por su parte, Mauricio Mora Pérez, gerente de la Fundación Produce Puebla, AC, mencionó que desde hace 20 años esta asociación se enfoca en utilizar la innovación tecnológica para el aprovechamiento racional, la recuperación y conservación de los recursos naturales en proyectos productivos. Mencionó que el agua y el sueño son dos elementos estratégicos para resguardar la soberanía alimentaria, por lo que es importante conocer tecnologías que eficienten el uso de estos recursos, como: sistemas de riego por goteo, micro aspersión, riego subterráneo, compostas, cultivos de cobertura y abonos verdes, entre otros.

Finalmente, a la sección Mejores prácticas de la sociedad civil e innovación social, se presentó a Corazón y Vida Maya, AC, que trabaja con comunidades mayas de Quintana Roo y busca marcar la diferencia en el ámbito social con programas sustentables que mejoren su calidad de vida, además de enaltecer la cultura a través del intercambio de conocimiento, de acuerdo con su directora, Anaid Corona Méndez. Los principales programas de esta organización son: la promoción de productos a través del comercio justo; el impulso a recorridos ecoturísticos; así como la capacitación y certificación de comunidades.