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MÉXICO, DF., 5 de julio de 2014.- Ante el incremento de la tasa de nacimientos por cesáreas en México que, de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Salud, ha presentado un crecimiento del 50.3 por ciento en 12 años, pasando del 29.9 por ciento en el año 2000, al 45.2 por ciento en el 2012, la diputada Lucia Garfias Gutiérrez, del Grupo Parlamentario Nueva Alianza, solicitó a la Secretaría de Salud para que facilite el acceso a información a las mujeres embarazadas sobre los riesgos de las cesáreas, y que promueva el parto vía vaginal.
De acuerdo a un comunicado de prensa, al promover una iniciativa con Proyecto de Decreto que modifica el artículo 64 bis de la Ley General de Salud en materia de atención materno-infantil, la legisladora señaló que se pretende dar una solución para este problema de salud pública, que en el 2012 llevó a México a ser el primer lugar de cesáreas en el mundo, además de que supera el límite máximo recomendado por la Norma Oficial Mexicana 007-SSA2-1993, que plantea un 20 por ciento en el total de los nacimientos por esta práctica.
La diputada federal reitera en el documento que actualmente en México el nacimiento por cesárea se da prácticamente en 1 de cada 2 alumbramientos y en el sector privado llega a cerca del 70 por ciento. Añade que la mayoría de las cesáreas no están medicamente justificadas y los expone a la madre y el bebé a riesgos innecesarios.
Garfias Gutiérrez informa que las mujeres que atienden sus partos en los hospitales privados llegan a tener hasta un 70 por ciento de cesáreas; mientras que en el sector público, en el IMSS el incremento fue de 29.9 por ciento; en la Secretaría de Salud, del 51.2 por ciento; y en el ISSSTE, de 58.5 por ciento.
En este sentido, agregó que la Comisión Federal de Mejora Regulatoria estima que si durante los próximos 5 años se redujera en un millón 600 mil el número de cesáreas, el sector salud se ahorraría un estimado de 13 mil millones de pesos.
La diputada Lucila Garfias propone sustancialmente que se estandaricen los protocolos para tener una rutina de doble diagnóstico en casos complejos; estructurar y organizar las salas de parto, para una labor eficiente y satisfactoria; establecer medidas para evitar la primera cesárea, reduciendo las futuras complicaciones en los embarazos subsecuentes, así como el gasto adicional que implica dicha práctica, e impulsar una cultura de promoción del parto vaginal después de la primera cesárea.
La legisladora afirma que este tipo de alumbramiento se ha convertido en una alternativa frecuente al parto natural; sin embargo, sólo debería de ser una opción de último recurso. Precisa que esta situación ha generado complicaciones para las mujeres, sus bebés y costos adicionales para el sistema de salud, por la falsa percepción de que la cesárea es segura, favorable y rápida para el nacimiento en comparación con el parto vaginal.
La iniciativa de Garfias Gutiérrez advierte que esta práctica sin control está vinculada con el doble de riesgos de mortalidad materna, en los partos pre-término, en la muerte neonatal, además de que cerca del 16 por ciento de los niños nacidos por cesárea presentan obesidad a los 3 años de edad, contra el 7.5 por ciento de los infantes nacidos por vía vaginal.
Por ello, la también integrante de la Comisión de los Derechos de la Niñez en la Cámara de Diputados, solicitó que la madre sea informada sobre los beneficios de un parto por vía vaginal, tales como la rápida recuperación, instauración y continuidad de la lactancia materna, menores posibilidades de que el bebé sufra sobrepeso y mayores probabilidades de que ella recupere su peso en menor tiempo.
De igual manera, sostuvo que se le debe informar a la gestante sobre los riesgos de tener un parto por cesárea y que no sólo se le presente como una opción fácil y cómoda; ya que esta desinformación impide que las mujeres tomen una decisión consciente sobre los riesgos y beneficios que implica esta práctica.