MORELIA, Mich., 10 de abril de 2016.- El 21 de marzo inició la temporada de calor y, con ésta, el aumento de enfermedades propias de este lapso, como golpe de calor, insolación, quemaduras solares y enfermedades diarreicas.

De acuerdo a información de un comunicado, Fabio Silahua Silva, jefe del Departamento de Epidemiología y Medicina Preventiva, existen varias recomendaciones para evitar las enfermedades propias de la temporada.

En el caso del golpe de calor, síndrome común en lugares donde las temperaturas oscilan entre los 38 y los 40 grados centígrados, se sugiere beber abundante agua natural y mantenerse a la sombra el tiempo que sea posible para evitarlo.

Los síntomas de golpe de calor son: sequedad en la piel y la boca, aumento en la temperatura corporal, dolor de cabeza, mareo, desorientación y desmayo.

La gravedad del golpe de calor radica en que éste puede ocasionar la muerte en unas horas, por lo que las recomendaciones son, si alguien presenta los síntomas: retirarle del sol, quitarle la ropa, envolverle en una sábana húmeda y llevarle inmediatamente a un hospital.

De igual manera, para evitar insolación, que causa deshidratación, mareo, confusión y dificultad para pensar, hay que evitar estar mucho tiempo bajo el sol y, si es necesario estarlo por cuestiones de trabajo, mantenerse hidratado con agua natural, protegerse con sombrero o sombrilla y usar ropa clara.

Además, para evitar los dos casos anteriores, en caso de laborar a la intemperie se recomiendan descansos cada dos o tres horas a la sombra.

El jefe del Departamento de Epidemiología y Medicina Preventiva mencionó que, debido al cambio climático, los rayos ultravioleta llegan más directos, por lo que, para prevenir quemaduras en la piel, recomendó el uso de filtro solar en todas las partes expuestas del cuerpo, evitar la exposición al sol entre 11 de la mañana y 4 de la tarde, el uso de gorra, sombrero o sombrilla, además de no estar ante los rayos directos más de 15 minutos en caso de personas con piel blanca y hasta 20 en caso de piel morena.

Finalmente, Silahua Silva emitió algunas sugerencias en el manejo de alimentos, como disminuir la temperatura del refrigerador, evitar tener la comida fuera de éste, sobre todo salsas y guisados con carne, jitomate y cebolla, por su fácil descomposición.

Además, recomendó el lavado adecuado de manos con agua y con jabón inmediatamente antes de preparar los alimentos, así como después de ir al baño o de cambiar un pañal, y la desinfección de alimentos con cloro o plata coloidal además del lavado regular.

Los síntomas usuales de enfermedades gastrointestinales son fiebre, vómito y diarrea, aunque pueden variar dependiendo de las bacterias. Si se presentan, hay que llevar al paciente al Centro de Salud más cercano para evitar su deshidratación.

Sin embargo, en el caso de menores de 5 años de edad y adultos mayores, los signos de alarma por deshidratación son: falta de apetito, llanto sin lágrimas, boca seca y, en el caso de los bebés, hundimiento de la llamada mollera.

Cabe mencionar que la deshidratación puede agravarse rápidamente en niños y adultos mayores, por lo que, en caso de presentar estos síntomas, hay que llevarlos de urgencia a un hospital para su rehidratación y evitar consecuencias graves como el choque hipovolémico.

Los signos de deshidratación grave son letargo o pérdida del conocimiento, escasa ingestión de líquido o incapacidad de beber, ausencia de diuresis (el paciente no orina), extremidades frías y húmedas, tensión arterial baja o indetectable, así como pulso rápido y débil.