Energías renovables, cada vez más accesibles para el hogar: especialista
MORELIA, Mich., 23 de mayo de 2016.- La región de América corre riesgo de quedarse sin la protección del organismo que durante décadas ha vigilado y defendido los derechos humanos en el Hemisferio Occidental. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha advertido este lunes de que está arruinada. Si los países miembro no empiezan a entregar fondos, tendrá que despedir casi a la mitad de su personal a partir de agosto y dejar de ejercer funciones clave de su mandato. Algo que, para los expertos, podría tener consecuencias nefastas.
“Nos preocupa que la crisis financiera debilite la capacidad del sistema interamericano de responder a las víctimas de graves violaciones de derechos humanos”, resume la situación Viviana Krsticevic, directora ejecutiva del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL).
Según publica El País, todo ello cuando la Comisión “ha sido la que, cuando hay deterioros institucionales que afectan a los derechos humanos, es la primera, y muchas veces la única dentro de la OEA, que llama la atención sobre los derechos humanos”, recuerda Ariel Dulitzky, director de la Human Rights Clinic de la Universidad de Texas y exsecretario ejecutivo adjunto de la CIDH. Esto hace que la crisis que atraviesa pueda “repercutir en la calidad de los derechos humanos y en la calidad democrática de la región”, alerta.
Según ha adelantado el presidente de la Comisión, James Cavallaro, a EL PAÍS, si el organismo no recibe fondos con urgencia, a partir de agosto tendrá que despedir al 40 % de su personal, o a 30 de las 78 personas que emplea. Pero las consecuencias van mucho más allá. El peligro es hacer retroceder los avances logrados por la Comisión “30 años”, lamenta su secretario ejecutivo, Emilio Álvarez Icaza.
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/05/23/estados_unidos/1464011157_343108.html