MORELIA, Mich., 12 de septiembre de 2014.- El Instituto Nacional de Migración (INM), advierte del peligro que corren los grupos de migrantes ante los climas extremos que se registran tanto en la frontera norte como en la frontera sur del país, debido a que existe una variación climática que va de los 28° centígrados hasta los 45° centígrados, sobre todo en zonas desérticas.

 

De acuerdo con un comuicado, durante el verano, el clima en ambas fronteras registra temperaturas que van desde los menos dos grados hasta los 42° centígrados, (como es el caso de Sonoita y San Luis Río Colorado); de 28° centígrados (en zonas como Ixtepec o Tamaulipas); y de 36° centígrados en Arriaga, Chiapas, por lo que los migrantes se encuentran expuestos a casos de congelamiento, deshidratación, insolación, golpe de calor, escoriaciones, quemaduras en la piel, desorientación y pérdida del conocimiento, poniendo en riesgo la vida.

 

Las fuertes lluvias que provocan el aumento en los niveles de agua en ríos, lagos y arroyos, también ponen en peligro la integridad física de migrantes,  al desconocer los riesgos que enfrentan.

 

De enero a agosto del año en curso, los Grupos Beta de Protección al Migrante han salvado y proporcionado asistencia social a más de 130 mil migrantes quienes en su intento por llegar a Estados Unidos y al cruzar por regiones desérticas o caminos agrestes con bajadas naturales de agua, han expuesto su integridad física.

 

Durante el mismo periodo, dichos grupos atendieron a 411 migrantes que resultaron heridos debido a los extremos cambios climáticos; asimismo, lograron rescatar a mil 989 migrantes que se encontraban en peligro de muerte y localizaron a 23 migrantes que fueron reportados como extraviados.

 

Ante tales peligros y para salvar la vida de quienes intentan cruzar hacia los Estados Unidos, los Grupos Beta  han implementado dos tácticas especiales para este verano: la primera ha sido denominada “Cajas de vida”, que consiste en distribuir de forma estratégica compartimentos a lo largo del desierto que son abastecidos con botellas de agua así como sobres con suero para que quien los necesite pueda consumirlos.

 

La segunda, en las rutas montañosas y de sierra, donde los Grupos Beta hacen varios recorridos durante el día, (tanto en vehículo como a pie), equipados con localizadores GPS y teléfonos satelitales, además de las herramientas habituales como binoculares, cámaras térmicas y botiquines de trauma y oxigenoterapia para brindar ayuda oportuna a todos los migrantes.

 

En total, la labor humanitaria de los 22 Grupos Beta que están distribuidos en los estados de Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Chiapas y Oaxaca, ha dado atención a 157 mil 302 migrantes de enero a agosto del año presente, reforzando su compromiso y el del Instituto Nacional de Migración, de proteger la vida, integridad física y derechos humanos de todos los migrantes que transitan por territorio nacional.