Acusa supuesto despido injustificado por ser transgénero

MORELIA, Mich., 11 de mayo de 2015.- Por un despido sin argumentos, Andrés Gallegos Hernández, de 29 años de edad, presidente del Comité Electoral Municipal de Nocupétaro, acudió la mañana de este lunes a la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) a presentar una queja, pues asegura que lo despidieron por sus preferencias sexuales.

“Yo recibo una llamada el miércoles 6 de mayo por la tarde-noche en la cual se me notifica que he sido destituida, pero cuando pregunto los motivos, el Enlace que fue el que me llamó, me dice ‘no sé’, y yo esperaba que algún miembro del Consejo me llamara o se me hiciera llegar por escrito algo, y nada”.

Por tal motivo refirió que llamó a la vocal de Organización, quien le indicó que su salida tenía que ver con una renuncia del secretario quien decía que no recibía el suficiente apoyo de su parte, lo cual consideró una mentira y lo atribuye a un acto de discriminación, pues considera que nunca dio motivos para que la destituyeran: “Al contrario, yo hacía hasta actividades que no me correspondían para apoyar a mis compañeros del Comité”.

Informó que el cargo lo obtuvo en enero pasado y lo ocupó hasta el pasado 6 de mayo, y refirió que desde su llegada al puesto hubo comentarios discriminatorios hacia su persona, pues los siete integrantes restantes del Consejo que presidía, tres hombres y cuatro mujeres, no estaban de acuerdo en que un transgénero los mandara.

“La mayoría de los integrantes del consejo tienen otros empleos y una persona que tiene doble plaza no realiza un trabajo con calidad; yo los apoyé para que no tuvieran problemas en sus otros empleos, y ellos empezaron a generar quejas de mí con el Enlace de que era autoritario y otras cosas falsas”.

CEDH ofrece respaldo

Sobre la queja presentada por el joven Andrés Gallegos, el ombudsman de la Comisión Estatal de los Derechos humanos, José María Cázares, indicó que se dará seguimiento y atención para llegar a una conciliación con las partes involucradas.

Refirió que este es el tercer caso que se atiende por discriminación por preferencias sexuales, pues hace un año se dio una queja en Zamora, y hace un año y medio fue en Apatzingán.

Lo que buscan, dice, es generar las mejores condiciones para todas las personas sin importar orientación sexual, y en este caso prevén atenderlo en un plazo máximo de un mes y medio.