MORELIA, Mich., 24 de abril de 2019.- Los menores con déficit de atención con hiperactividad se caracterizan por ser inquietos, impulsivos o distraídos que cambian constantemente de actividades, sin embargo, se estima que hasta un 25 por ciento pueden estar sobre diagnosticados.

Así lo señaló Maday Piña Reyna, neuróloga pediatra del Hospital General Regional (HGR) No. 1 del IMSS Morelia-Charo, al precisar que este trastorno se presenta del uno al 5 cinco por ciento de la población infantil, es decir, que al menos hay un niño o niña en cada salón de clases.

“Anteriormente se consideraba que existía únicamente en los niños, y uno de los criterios para diagnosticarlo era la edad, no podían tener más de 14 o 15 años, sobrepasado esa edad se decía que la hiperactividad no existía en jóvenes ni adultos y esto es un error”, manifestó.

Causas

La especialista explicó que la principal causa de este trastorno es la genética, aunque en otros casos puede derivar de la prematurez en el nacimiento, el abuso de sustancias como alcohol o drogas por parte de la madre durante la gestación, o problemas durante el nacimiento.

En etapas más avanzadas, un traumatismo o padecer meningitis pueden ser otras de las causantes.

Diagnóstico

Para elaborar un diagnóstico de déficit de atención con hiperactividad, los especialistas se deben basar en la información que proporcionan los padres sobre el comportamiento del menor en la casa, la escuela y los diferentes ámbitos, así como un encefalograma, tomografía o estudios de hierro y tiroides, apuntó la neuróloga pediatra.

Y es que indicó que existen profesionistas que se basan únicamente en la elaboración de una serie de cuestionarios del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, mejor conocido como DM5 por sus siglas en inglés.

“Si nosotros empezamos a palomear las preguntas que se hacen en esos cuestionarios, probablemente tendríamos una incidencia mucho mayor de niños con este trastorno de lo que realmente es. Tenemos que ser muy cuidadosos en investigar si está presentando este problema en todos los ambientes o son problemas de conducta que se circunscriben nada más a uno”, recalcó.

Entre las conductas o padecimientos con las que se puede confundir este trastorno, se encuentra la ansiedad, la depresión, el trastorno de aprendizaje, menores con un coeficiente intelectual alto, crisis epilépticas de ausencia, niños o niñas sin límites y reglas en el hogar

“El hecho de que no haya un marcador biológico, como una prueba de laboratorio o estudio de imagen, para poder diagnosticar este trastorno, hace que su diagnóstico se vuelva un poco más difícil que otras enfermedades”, indicó Piña Reyna.

Tratamiento

El déficit de atención con hiperactividad es un trastorno que no tiene cura, pero sí puede ser controlable, y una vez realizado el diagnóstico, que ocurre principalmente en edad escolar por tener un mal rendimiento, el menor deberá empezar un tratamiento que lo ayude a mejorar el aspecto académico y su conducta para sentirse incluido y aceptado, ya que de lo contrario podría derivar en otras patologías como ansiedad y depresión.

La especialista aconsejó que el 50 por ciento del tratamiento debe de ser a través de medicamentos y el 50 por ciento restante mediante terapias cognitivo-conductuales, así como practicar algún deporte como la natación. “Es muy importante el apoyo de los papás y de los profesores”, destacó.

Recomendaciones

En casa, la médico Maday Piña Reyna aconseja establecer límites y reglas, mientras que en la escuela se recomienda a los profesores tenerlos lo más cercano a ellos como sea posible, alejados de una ventana y cerca de niños que no sean similares a él, sino modelos a seguir.