Santuarios de la Monarca, en una de sus mejores temporadas…

OCAMPO, Mich., 28 de diciembre de 2019.- Desde mediados del mes de noviembre se abrió la temporada de visita a los cuatro santuarios de la mariposa monarca en Michoacán. Aún no es comparable con el año pasado, una de las mejores temporadas en mucho tiempo. Pero el País de la Monarca tiene muchos días de vida, y puede suceder lo del año pasado.

Quizá el santuario más grande es El Rosario, ubicado en el municipio de Ocampo. Para visitar este lugar se recomienda básicamente ir abrigado, porque en esta temporada hace frío en esa zona de la sierra michoacana. También se recomienda llevar calzado cómodo y apto para caminar por un buen rato. Pero quizá la recomendación mayor es que se llegue con actitud de poder subir casi 2 kilómetros y medio de ladera.

Al llegar a El Rosario se debe pagar una primera cuota, la del vehículo en que se llega. El costo por automóvil es de 50 pesos, mientras que por autobús es de 100. Desde la llegada de estacionamiento corren jóvenes y chiquillos para acercarse a los visitantes, y ofrecerles todo tipo de cosas, desde prendas de vestir, opciones para alimentarse, hasta canciones.

En algún momento puede parecer hasta un acoso tanto ofrecimiento, porque éste no para; a lo largo del camino que lleva a la entrada donde empieza el ascenso hasta la parte núcleo del Santuario, cualquier persona con la que uno se tope le va a ofrecer algo o pedir dinero.

Uno de los comerciantes de comida en este santuario señala que los ejidatarios le cobran alrededor de 15 mil pesos mensuales, los cuales a veces no logra sacar y otras veces sí; “ojalá haya muchos días como éste”, dice a Quadratín, porque estos días previos a la llegada del año nuevo, el santuario luce repleto.

Para ingresar a la zona de ascenso para llegar al núcleo del santuario, se pagan 50 pesos por persona. La entrada al baño es de 5 pesos. Primero hay un camino con escalones y rampas el cual está acordonado. Este es de aproximadamente 700 metros, tiene descansos con pequeñas bancas improvisadas de madera.

Después hay una cuesta de unos quizá 500 metros donde sólo está el camino con algunas piedras, siempre acompañado de la belleza espectacular del bosque. Después se llega a otra zona más plana, donde por lo regular llegan los caballos que se rentan por aproximadamente 100 pesos. Se caminan otras decenas de metros, ya para ese entonces se ha perdido la cuenta.

Las personas que suben continuamente se van deteniendo porque la subida es cansada, es muy común preguntarle a los que bajan “¿cuánto falta?” y “¿sí se ven mariposas?”; las respuestas son variadas, pero siempre contestan que ya falta menos.

Finalmente ya a unos 200 metros se encuentra la zona núcleo, a la cual hay que llegar en silencio, es una de las recomendaciones que se hacen además de evitar la fotografía con flash, y por supuesto tirar basura.

Es una suerte de volado encontrar esta zona núcleo con las mariposas volando sueltas, sin estar agrupadas como en racimos. Para ello debe haber un clima soleado, eso hace que se dispersen y vuelen por los alrededores. Si por el contrario está nublado, estarán todas juntas y se podrá disfrutar poco de este fenómeno migratorio. Es importante dejar en claro que a lo largo del trayecto hay vigilantes, y la zona se mantiene acordonada, por lo que hay restricciones para acercarse al punto nuclear. Aprobar presupuesto, coloca a Michoacán en mejor posición en 2020, Silvano a diputados.