MORELIA, Mich., 15 de julio de 2019.- Fortalecida y en crecimiento está la Representación Parlamentaria en el Congreso del Estado, mientras que la división ha mermado su representatividad y capacidad de operación de los grupos parlamentarios de los partidos Morena, Acción Nacional, de la Revolución Democrática, Revolucionario Institucional y del Trabajo.

La Representación Parlamentaria en el Congreso del Estado detenta ya el 12.5 por ciento de los votos ponderados ante la Junta de Coordinación Política, organismo ante el que se han debilitado los partidos mayoritarios porque los coordinadores no representan los intereses de la totalidad de los integrantes de sus bancadas.

Morena, la primera fuerza política con 12 diputados, quedó partida a la mitad, con motivo de la designación del Auditor Superior de Michoacán; por un lado, quedaron Teresa López, Alfredo Ramírez, Sandra Luz Valencia, Laura Granados, Mayela Salas y Francisco de Jesús Cedillo, por otro, Osiel Equihua, Fermín Bernabé, Sergio Báez, Cristina Portillo, Zenaida Salvador, Antonio de Jesús Madriz.

Desde el cierre del primer periodo de sesiones el grupo morenista perdió a Wilma Zavala quien renunció a la bancada por el hostigamiento que sufría de parte de Alfredo Ramírez, entonces coordinador y de Cristina Portillo, vicecoordinadora.

La segunda fuerza política, la bancada del Partido Acción Nacional, podría dejar de serlo por la inconformidad que generó el propio coordinador Javier Estrada, al acusar a José Antonio Salas de ayudar a hacer cochupo al PRI y a Morena para la designación del auditor quien está valorando su salida del grupo.

De concretarse su separación de Salas del grupo, Acción Nacional perdería la posibilidad de acceder a la presidencia de la Junta de Coordinación Política ya que solo los partidos con el 20 por ciento de la representación del Congreso tienen ese derecho.

La bancada del Partido de la Revolución Democrática de compartir la segunda posición en el Congreso con ocho diputados, comenzó por perder uno porque al regresar de una licencia Francisco de Jesús Cedillo decidió volver a su partido original, Morena; luego perdió a Érik Juárez, Humberto González y Miriam Tinoco quienes renunciaron a su militancia perredista.

Acabó con una representación por debajo de la que tiene el Partido Revolucionario Institucional en cuya bancada también se evidenció que hay inconformidad al menos de Adriana Hernández y Omar Carreón por la forma en que se toman las decisiones al interior por su coordinador Eduardo Orihuela a quien apoyarían aun Marco Polo Aguirre y Yarabi Ávila.

Los cuatro diputados del Partido del Trabajo siguen divididos; por un lado, la coordinadora Brenda Fabiola Fraga y Teresa Mora y por otro Salvador Arvizu y Baltazar Gaona quienes prácticamente desde el inicio de la 74 Legislatura han votado de forma dividida y Gaona ya ha amagado con dejar la bancada.

Con solo dos integrantes la mini bancada del Partido Verde Ecologista de México no tiene mayores diferencias a su interior.

La Representación Parlamentaria resultó fortalecida con la suma de los tres ex perredistas ya que originalmente la constituyeron el único diputado de Movimiento Ciudadano Javier Paredes y Wilma Zavala de Morena, lo que incidirá en la estructura del Congreso para el segundo año legal de la 74 Legislatura.