MORELIA, Mich., 30 de abril de 2020.- Constituyen poco más de un tercio de la población mexicana y sus derechos se encuentran consagrados en la Carta Magna y tratados internacionales; sin embargo, los niños en México continúan como uno de los segmentos que enfrentan mayor riesgo de rezago.

Desde la vida hasta el acceso a un medio ambiente sano, los niños ven vulnerados sus derechos en múltiples formas y por distintos actores, lo que compromete el desarrollo pleno y saludable de la infancia mexicana.

Niñez en riesgo

De acuerdo con la Red de los Derechos de la Infancia en México (Redim), la violencia en el país cobra la vida de 3.6 menores de edad cada día.

La niñez no sólo sufre de muerte violenta, sino que se ha detectado una creciente cifra de víctimas infantiles de feminicidio, que en los últimos años tuvo, por cada 10 casos, una niña o adolescente como agredida.

Para el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), pareciera que en México no hay espacios seguros para los niños y los adolescentes, ya que en promedio el 60 por ciento  de los menores de 14 años ha sufrido castigos o métodos disciplinarios violentos, mientras que el 43 por ciento de los adolescentes ha vivido alguna manifestación de agresión sexual.

El hogar, la escuela, los espacios comunitarios, todos son escenarios posibles para la violencia contra la niñez y la adolescencia, incluso cuando proceden de otros países, expuso Unicef: entre 2013 y 2015, la cantidad de menores de edad no acompañados que intentaron ingresar a México de manera ilegal se triplicó, lo que muestra la dimensión de un sector altamente vulnerable a cualquier forma de abuso.

La incidencia de riesgos de mortalidad, desnutrición grave, ausencia de oportunidades educativas, obligación de incorporarse al mercado laboral, el matrimonio o la maternidad precoces y la violencia extrema en sus numerosas formas, colocaron a México en el sitio 90 de 172, en el Índice de Peligros para la Niñez 2017, de la organización Save de Children, con condiciones peores que las observadas en Cuba, Argentina, Palestina o Tailandia.

Quién protege a los niños y los adolescentes en México

Pese a que México dispone de una sección de su Constitución Política dedicada a los derechos humanos, además que ha signado documentos destinados a buscar salvaguardar a la niñez y la adolescencia, fue necesario emitir la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, que prevé la protección de estos sectores sociales desde diversos ámbitos, como la salud, la educación, la cultura, la inclusión, el esparcimiento, entre otros.

Destaca por ser la primera norma que fue generada en el país específicamente para atender a la infancia y la adolescencia, ya que leyes anteriores abordaban de manera tangencial o secundaria la protección de los menores de edad, como es el caso de la Ley Federal del Trabajo, dedicada a normar las relaciones obrero patronales, pero que contiene un apartado sobre el trabajo infantil.

Asimismo, implica la participación de la sociedad, la familia y el sector privado en el cuidado de la niñez y la infancia, y se crearon el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), que cuenta con sus homólogos estatales y municipales, y Programa Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Pronapinna).

Además, se tienen instituciones que, incluso con anterioridad a la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, atienden a menores de edad vulnerables o víctimas, como el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (Dif), y organizaciones como Unicef y Save the Children, entre las que tienen un alcance internacional, y diferentes asociaciones con cobertura local o regional.