MORELIA, Mich., 20 de agosto de 2017. – En Michoacán, menos del 5 por ciento de las personas privadas de la libertad cumplen con los requisitos para estudiar una carrera universitaria, y quienes sí cumplen con los requisitos, como tener concluidos sus estudios preparatorianos, se enfrentan a un segundo obstáculo: el sistema penitenciario no cuenta con el equipo de multimedia para que puedan estudiar en línea, admitió el coordinador José Candelario Jaime Contreras López.
En entrevista para la prensa, el jueves por la mañana, señaló Contreras López: “el interés es variado. Hay muchas personas que ya concluyeron su bachillerato, que reúnen los requisitos y ya estamos coordinados con la universidad. Pero estamos parados porque hay que adquirir el equipo audiovisual, que es caro”.
De los 4 mil 764 personas privadas de la libertad en presidios del estado, aproximadamente 200 tienen concluido el bachillerato, es decir, 4.19 por ciento del total.
De acuerdo con expertos en la materia, al menos en España, el 85 por ciento de las personas que estudian una carrera en reclusión no reinciden, por lo que es la educación una de las mejores inversiones en la reinserción social.
De acuerdo al estudio La Trasformación del Sistema Penitenciario Federal, de 2013, por la Secretaría de Gobernación, el Gobierno de México destina 140 pesos diarios para el sostenimiento de los internos en los presidios federales, cifras que coincidieron con lo gastado por otros estados y que contrasta con lo destinado para los estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México, 115 pesos en el mismo periodo de la pública de Segob.
Trasciende la cantidad invertida anualmente para sostener a los internos cuando la probabilidad y capacidad de reinserción social en el país continúa siendo cuestionada por académicos y autoridades.