Jardines de la Mintsïta, comunidad de respeto y protección al ambiente

MORELIA, Mich., 19 de marzo de 2023.- Aunque aún falta mucho por hacer y lo logrado en torno al medio ambiente no es suficiente, se celebró el 22 aniversario en la Comunidad Ecológica Jardines de la Mintsïta, con una convivencia y ceremonia de agradecimiento y compromiso para defender la tierra y el derecho a la vida.

Jesús Ramírez, de la comisión de vinculación de esta comunidad, explicó a Quadratín que en un inicio, cuando llegaron como cualquier colonia que se forma, lo hicieron con el anhelo de tener un lugar donde vivir, y ahí se dieron cuenta que estaban llegando a un lugar muy importante para todos los morelianos y todas las colonias circundantes.

Fue en 2003 que quienes llegaron a esa región, tomaron un acuerdo para ir por un camino de respeto y protección al ambiente, ya que se encuentran sobre una cuenca hidrológica de la minzita; “esa cuenca viene desde el Cerro del Águila y desemboca en el manantial, entonces dijimos: “no puede haber más drenajes en esta zona porque todos van a dar al agua y la contaminan”.

Entonces optaron por acciones ecológicas como los sanitarios secos, el trabajar con captadores de agua de lluvia a manera de cisternas, el trabajaron también con diferentes tipos de ecotecnias como la estufa ahorradora de leña Patsari, con la cual utilizan leña pero no tumban árboles, usan la leña que encuentran caída. Además, la misma ceniza que sale de las estufas se utiliza para hacer la mezcla para el sanitario seco, explicó.

Con el tiempo y a través de la coordinación con instituciones académicas, entre ellas la UNAM y la universidad Michoacana (UMSNH), han llevado a cabo trabajos de investigación, como “el mapeo participativo en la comunidad, donde nos dimos cuenta de los polígonos y la importancia de la biodiversidad que hay en esta zona, como aves, reptiles y peces, la función de los humedales y además tener la certeza de dónde acaba un polígono y empieza el otro”.

En ese sentido, el activista señaló que en la región había dos decretos de áreas naturales protegidas, una de ellas, el manantial de la minzita, y el segundo, el sitio Ramsar. El primero de ellos se decretó en 2005, mientras que el segundo lo hizo en 2009.

También realizan un trabajo fuerte en torno al monitoreo de calidad del agua, donde identifican puntos rojos de contaminación, señaló Jesús Ramírez, quien puso como ejemplo los casos de un drenaje a cielo abierto en Arko San Pedro, y la papelera que arroja agua al río grande, la cual no es apta para la vida; “y eso es con lo que riegan los sembradíos en el valle Morelia-Queréndaro, y que luego nos lo regresan en forma de jitomate, cebolla, chile y que luego no los comemos y es grave el daño que se está ocasionando”.

También desde hace tres años llevan a cabo un monitoreo de aves para revisar su situación, dijo, “y esto va a servir para tener un registro de aves que ya estaban registradas oficialmente, pero también para hacer nuestro propio registro, porque ahorita ya hay diferentes aves, ya no hay de la registradas, otras han llegado a estos lugares”, externó.