Con lesiones resultó un automovilista al volcar su unidad en Morelia
MORELIA, Mich., 2 de julio de 2020.- La Junta de Asistencia Privada (JAP), podría pasar a ser una dirección, ya que el análisis del ejercicio de su presupuesto anual arrojó que los procesos de cambio que se están generando desde la dependencia son mínimos.
El contralor del Estado, Francisco Huergo Maurín, explicó que dentro de los diversos procesos que se llevan en esa dependencia, se detectó un asunto extraordinario: “el 90 por ciento del presupuesto, 7 de 8 millones de pesos, se invierte en el Capítulo 1000 (mil)”, es decir, para el pago de salarios de personal de confianza, de base, interino y el gasto corriente de la dependencia.
Por lo anterior, juzgó el contralor, no satisface la dependencia los fines para los que esta hecha, los productos que genera son el mínimo frente al presupuesto que eroga en el pago de servicios personales.
“Se están revisando todas las instituciones y dependencias que no están aportando y que gastan mucho recurso en personal, el 90 por ciento en la Junta de Asistencia Privada, no puede ser tendría, que tener una relación 40 o 30 en gasto corriente y 70 por ciento en generar procesos de cambio, así debería de ser el presupuesto”, por ello, que de ha considerado se integré como una dirección.
Lo dicho por Huergo Maurín coincide, por ejemplo, con el último informe del año pasado, de esta dependencia, en el que se hizo el desglose de 8 millones 678 mil 721 pesos en el gasto corriente, ¡todo el presupuesto anual!, de acuerdo a la información de Transparencia.
Entre lo reportado en diciembre destaca el pago de 3 millones 10 mil 480 pesos en remuneración al personal, más el pago de las prestaciones; se destinaron 134 mil 773 pesos en materiales y suministros; a servicios generales, como energía eléctrica, agua y renta, entre otros, 888 mil 316; así como un pago trimestral de 224 mil pesos en la renta de un inmueble, al parecer las oficinas.
La plantilla de la dependencia, según el área de transparencia, se compone por 26 funcionarios de confianza y 20 por contrato, de los que no se especifica identidad ni funciones a desempeñar dentro de la institución.