Humboldt, el documental con mirada y alma del explorador en México

MORELIA, Mich., 21 de octubre de 2017.- Una visión fresca, atractiva y dinámica sin perder la objetividad y veracidad es la que transmite Humboldt en México, la mirada del explorador, un documental que retrata el legado de esta figura histórica y su aporte a la ciencia.

Dirigido por Ana Cruz, el documental tendrá una función especial este domingo a las 12 horas en el Teatro Melchor Ocampo, en el Centro Histórico de la capital michoacana, como parte de la 15 edición del Festival Internacional de Cine de Morelia, la cual será la segunda exhibición masiva del filme.

En entrevista para Quadratín y con la emoción a flor de piel, la directora expresó la visión que se imprimió en la producción fílmica de 82 minutos de duración que tuvo la suerte, dijo, de contar con un gran equipo de grabación y de actuación, que transmitió naturalidad y espontaneidad en pantalla que de la mano de la historia ha tenido un gran y laureado inicio.

“Es una película a cerca del explorador Alexander Von Humboldt, es una especie de recorrido por los lugares que Alexander estuvo en México y lo que se trata de hacer es transmitir este espíritu de aventura y viajero que tuvo.

“Mirar con la mirada del explorador, que es la mirada del que quiere descubrir cosas nuevas, no llegar con prejuicios; él trató de llegar y redescubrir lo que había leído con mirada nueva porque él decía que la vida es un viaje y hay que ir con estos ojos de descubrir y sorprendernos por la naturaleza”.

Reconoció que el camino que se tuvo que seguir para que este producto reconocido por su calidad viera la luz fue un tanto complejo pero el proyecto fascinó a las instancias que finalmente otorgaron el apoyo.

Entre la investigación y la grabación se invirtieron dos años y medio, de los cuales, seis meses fueron de investigación, otros más en conseguir el financiamiento de instancias para proceder con la grabación y el resto del tiempo fue para el rodaje y edición.

“Me tardé dos años y medio, en investigación, plantearlo y conseguir el financiamiento para poder levantar el proyecto; aunque es documental la parte de la recreación con actores sí implicó reto no solo de financiación sino por la recreación y caracterización”.

El apoyo lo consiguió por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), que después de varios filtros e investigaciones accedió a otorgar el recurso y con ello se concretó el filme.

El ritmo del documental es interesante, pues se persiguió la idea de hacerlo ameno con los espectadores, mismo que logró aprovechando el tema científico de manera atractiva para los jóvenes e incluso que resultara inspirador.

Teniendo locaciones mexicanas, en su mayoría de Acapulco y Chilpancingo, además de la Ciudad de México y las minas de Guanajuato, Ana Cruz destacó lo motivante que resultó el trabajo desde su inicio hasta el fin, lo que se transmite en pantalla y atrapa a los que la ven.

Esto ocurrió en Guanajuato, estado que respaldó y patrocinó el proyecto y pidió que fuera la sede del estreno mundial, a lo que accedieron logrando una apabullante respuesta de los asistentes que incluso la ovacionaron por cinco minutos.

“Conacyt fue muy sensible, le encantó el proyecto y aunque lo vio como reto mayúsculo estuvieron dispuestos a correr el riesgo conmigo; Guanajuato fue coproductor del proyecto y hubo una función especial y aunque no ha habido premios le apostamos a que sí.

“En Guanajuato la respuesta fue extraordinaria, la gente se desbordó, se quedaron como 100 personas afuera en la exhibición y hubo un aplauso de cinco minutos; no se la pierdan, es una película muy divertida, amena, llena de descubrimiento y encierra muchas sorpresas para el espectador”, expresó emocionada la directora.