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MORELIA, Mich., 4 de diciembre de 2018.- Desde temprana edad supo que su pasión era la música y que su discapacidad visual no sería ningún impedimento para lograr el sueño de dedicarse a ella de manera profesional, hasta hacer de esta expresión artística su modo de vida.
Hoy, con 61 años cumplidos y más de cuatro décadas de carrera musical en las que ha puesto dedicación, trabajo, disciplina, sacrificio, pero sobre todo amor, don Francisco Calderón ha alcanzado un éxito más al haber sido galardonado con el Premio Estatal al Mérito para Personas con Discapacidad 2018.
Sin embargo, don Francisco relata que no todo el camino ha sido fácil, ya que siendo apenas un niño de 10 años de edad buscó una oportunidad para ingresar al Conservatorio de las Rosas de Morelia, una de las escuelas especializadas en música más importantes del país.
“Me rechazaron porque el director dijo que era imposible porque no podría ver las notas musicales y no podría hacer nada. Salí un poco triste pero debido a eso dije: ‘yo tengo que poder’ y eso me dio fortaleza, fue un reto para mí y desde entonces lo hice”, compartió.
Y es que desde los seis años ya tocaba la armónica y a los ocho aprendió los ritmos del acordeón. Pero fue hasta los 14 años mientras tomaba cursos de natación cuando conoció a la maestra Lupita, quien sería su profesora de música en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
“A ella le debo todo, fue la única que sí me ayudó y de ahí para acá gracias a ella salí adelante”, recordó don Francisco, quien tiene especial debilidad por la música romántica aunque por su trabajo toca de todo para complacer a los melómanos.
Actualmente su especialidad es el teclado, pero en su trayectoria ha sido organista y participado en diversos grupos musicales con los que tuvo la oportunidad de alternar con reconocidos conjuntos y orquestas como Los Bukis, Los Sonors, Pablo Beltrán Ruiz y Miguel Ángel Serralde.
“La discapacidad no es ningún impedimento, todo se puede hacer. En este caso la música nos fortalece y es muy bonito cuando uno siente que la gente baila y le gusta lo que uno interpreta, eso nos eso hace salir adelante, no solo nos halaga, sino que me obliga a superarme más”, agregó.
Por ello, don Francisco Calderón invitó a todas las personas, independientemente de su condición, a luchar por sus sueños, pues él nunca imaginó que podría llegar a hacer arreglos musicales con ayuda de una computadora en su propio estudio de grabación.
Finalmente, don Francisco señaló que en Morelia aún falta mucho trabajo por hacer para lograr una verdadera inclusión de las personas con discapacidad, desde respetar los señalamientos, la implementación de semáforos inteligentes y permitir el ingreso a lugares con perros guía.
De acuerdo con el censo de población de 2010 del Inegi, en Michoacán viven 267 mil 716 personas con algún tipo de discapacidad, lo que también se representa con 6.2 de cada 100.
Las más comunes son: dificultad para caminar o moverse (59.8 por ciento), visual (26.5 por ciento), auditiva (12.4 por ciento), y del lenguaje 84.9 por ciento.