MORELIA, Mich., 24 de octubre de 2018.- A cerca de 48 horas de que la colonia Agustín Arriaga Rivera quedara bajo el agua, tras las lluvias intensas que generó el paso del huracán Willa, las vialidades aún exhiben los estragos  que la acumulación de agua ocasionó.

En recorrido efectuado por Quadratín en el asentamiento, uno de los 42 que se vieron afectados por el fenómeno, fue posible observar el lodo que persiste en las superficies de rodamiento y los materiales de desecho que los residentes colocaron en algunos puntos, a la espera de su recolección.

En el interior de los hogares, aún se encuentra agua estancada, la que alcanzó en algunas zonas hasta un metro de altura y provocó que la totalidad del patrimonio de las familias afectadas.

El dren Barajas mantiene un nivel que oscila entre el 60 por ciento y el 70 por ciento, luego que recibiera las aguas extraídas de las vialidades con bombas, en el curso del martes 23 de octubre y las primeras horas del miércoles 24 del mismo mes.

Sillas, sillones, llantas, entre otros, se localizan en el exterior de las casas, donde aún se pueden ver algunos costales utilizados en un intento por impedir el ingreso de agua a los negocios y las casas.

Vecinos de la colonia Agustín Arriaga Rivera lamentaron la insuficiencia del apoyo recibido al momento, ya que en las primeras horas tras la inundación y los encharcamientos severos que ocasionaron las intensas lluvias de la noche del domingo 21 de octubre y la madrugada del lunes 22 de este mes sólo hizo presencia el Ejército Mexicano para aplicar el plan DNIII y obsequiar agua potable y cobijas.

Las brigadas de personal municipal, principalmente la Policía Municipal, arribaron en el curso de la mañana del miércoles para iniciar las acciones de limpieza de las calles, no sin antes ingerir un almuerzo ligero.

Autoridades municipales, encabezadas por Humberto Arroniz Reyes, secretario del Ayuntamiento, expusieron que el rezago en la atención a la colonia Agustín Arriaga Rivera obedeció a la necesidad de atender asentamientos con mayor daño.

Será en las siguientes horas cuando las colonias que en los primeros dos días tras la contingencia no contaron con la presencia de las autoridades serán atendidas.

En tanto, los vecinos esperan y sacan con escobas y trapeadores el agua acumulada en sus viviendas, con algunas de sus pertenencias en el exterior, con la esperanza de recuperar una parte de su patrimonio.