Murciélagos, más cercanos a los humanos que los ratones: Bióloga
MORELIA, Mich., 7 de febrero de 2019.- A últimas fechas la información que se ha difundido a través de medios de comunicación y redes sociales, en relación con intentos de secuestro a mujeres en Morelia, ha generado un estado de alarma.
En Quadratín salimos a preguntarle a las mujeres cómo se sienten y qué medidas han tomado.
Patricia manifiesta que tiene que tomar previsiones con su hija adolescente, para recogerla y llevarla a los lugares donde tenga que ir. Para ella hay que tener mucho cuidado con los menores siempre, “no nada más ahorita porque hay una psicosis; hay que tener cuidado”. Explica que ya no es la situación de riesgo solo para mujeres jóvenes; a cualquier mujer le puede suceder, dice, y afirma no se siente segura en la ciudad.
Gisel, de 16 años, explica que sus padres la acompañan a las paradas del camión, en general cuando toma el transporte público, porque “da miedo. Yo no salgo por el miedo de que en algún lado me pase algo”. Cuenta que por la zona donde ella vive a cada rato se habla que desaparecen niñas.
Para Lupita, una estudiante de 15 años, es importante sentirse segura y sus papás lo saben; la acompañan también a muchos lugares a los que tiene que ir; “es una inseguridad de que llegue alguien y te suban a una camioneta o algo”. Dice que antes de todo esto, a veces la acompañaban sus papás, no lo solían hacerlo todo el tiempo, pero ahora sí.
A veces sí toma precauciones, pero otras no, reconoce Estefany de 19 años; “creo que si uno piensa negativamente van a suceder las cosas. Hay que estar positivas y que nada nos va a pasar, con el favor de Dios vamos a estar bien y seguir adelante”, explica, pero asegura también estar alerta porque en las mañanas cuando sale de su casa está al pendiente de revisar si ve algo extraño, no lleva audífonos y no está revisando el celular.
Berenice, de 19 años, quien asevera no sentirse segura en Morelia, explica a Quadratín que todas las mañanas cuando sale de su casa a la escuela, va tomando atención de lo que está a su alrededor porque le toca caminar por tramos que son muy solitarios y oscuros. Una de las medidas que toma es hacer los recorridos con compañeros de la escuela.
“A veces da miedo salir sola porque no sabes qué te pueda pasar, puede que ya no llegues a tu casa, entonces hay que estar viendo a las personas, más o menos los carros como los que se han escuchado en las redes sociales, revisar que no te sigan”, explica la estudiante.